Me quiebra el castigo saber mi existencia
Pensar
que iré tras un mundo baldío
rodeado de angustias que aquejan a un dios,
aquel que pierde su inmortalidad por las tardes
al quijar el vuelo de las gaviotas sobre un mar ardiente de cuerdas
donde se extienden las estrellas en sus anchas brazas.
regreso de la faena de pescador,
lanzo contras las rocas dos cuerpos de trigo;
abren sus alas las gaviotas y
corren al hambre de sus costas.
aquí está mi existencia
como los peses cortados entre las piedras
suplicando como los granos de arena
una oración tan mortal
Aquello
es solo la umbría ardiente que salta sombre las cosas
donde despierto vestido de cadáver
y de vacíos inmensos como los ojos de Ana
es la herida mortal del comienzo
para un Dios eterno
libertador de hombres.
- Autor: Daén (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de noviembre de 2014 a las 01:21
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 39
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