Mujer hermosa, ¿a donde van tus ojos?
¿que horizonte los lleva prisioneros?
por qué, esa boca, no grita
con la fuerza, ¡de un te quiero!.
Y que los tiempos regresen a verte
en remolino potente y sin fin
llevándose mis letras, cegando mis ojos
dejándome anonadado y sin palabras
detenido, sin camino
sin poder seguir el derrotero
de los petreles...
sin retornar a las costas
generosas de tus manos
hundiéndome en la mar
donde las preciosas sirenas
acunarán mi muerte
lejos del amanecer
de tus ojos.
- Autor: Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de noviembre de 2014 a las 11:30
- Categoría: Amor
- Lecturas: 68
- Usuarios favoritos de este poema: Isis M
Comentarios3
Muy hermoso y nutrido el verso amigo Esteban.
Grato leerle.
besitos
Isis
Me dejas anonadado y sin palabras...
Te saludo desde este cielo azul e implacable.
Esteban
¡Qué románticos versos! Esteban.
Parece que el cielo, donde vuelan los petreles, te ha dejado inspirado.
Un sincero y afectuoso saludo. Buena semana.
Más que los petreles, la inspiración la da la mujer hermosa.
Va mi saludo, en medio de un cielo intenso.
Esteban
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