Apenas muera la tarde
y se apague el sol ardiente
con mis ansias florecientes
tocaré tu piel que arde.
Ese sueño tan grande
que tenemos los dos,
de la nada floreció
entre sábanas y almohadas
con pasión desenfrenada
y el fruto de nuestro amor.
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Autor: Alejandro J. Díaz Valero
Maracaibo, Venezuela
- Autor: Diaz Valero Alejandro José ( Offline)
- Publicado: 10 de diciembre de 2014 a las 10:51
- Categoría: Amor
- Lecturas: 64
- Usuarios favoritos de este poema: marie, El Hombre de la Rosa, DELICADA ABRIL
Comentarios3
Bello
Muy hermoso y bello tu versara amigo Diaz valero...
Un placer pasar por tu portal...
Saludos de amistad de Críspulo...
Delicado y sutil el amor que florece entre sábanas y almohadas.
Me emocionó. Un abrazo de Bea.
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