Días felices y contentos.
Malos días, menos buenos.
Unos cuando no la veo…
los otros cuando la siento.
Mi mente está confundida,
apenas puedo apreciar
esos detalles que ocultan
su terrible realidad.
Cuando más contento estoy
al lado de mi “muñeca”,
aparece su fantasma
que despierta mi tristeza.
Me destroza sin piedad…
le duele que yo esté bien
(el día que no aparece)
al lado de otra mujer.
Conseguido lo que quiere
me deja sin rechistar.
No hace ni una llamada
(al contrario que esos días)
si huele felicidad.
Entonces nacen en mí
preguntas sin contestar…
¿Por qué si tanto me ama
(como dice) me crea tanta maldad?
Escrito en Mazagón el 7 de noviembre de 2014.
(ermanue) —
-
Autor:
ermanue (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 1 de enero de 2015 a las 04:30
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 108
- Usuarios favoritos de este poema: Black Lyon, El Hombre de la Rosa, Ermanue1
Offline)
Comentarios2
Poeta:
Maravillosa interpretación lírica de su propia mente que, en una paradoja amorosa, es incitado a escribir tales prosas.
¿Quién soy yo para responder a su inquisitoria?
Bueno, al dejar al descubierto su corazón, sobre todo al de un lector taimado, deliberadamente le respondo: Cuando una mujer ama realmente, mueve cielo y tierra. Pero cuando una niña ama, simplemente se confunde constantemente y no sabe lo que necesita. Puede que usted sea lo que ella quiere, pero no lo que necesita. A esas altura, por más amor que sienta por ella, primero está su salud mental y sobre todo, darle tiempo a ella, para que lo valore. No caiga en sus juegos. Quisiera darle más detalles, pero sería darle muchas armas y se convertiría en un monstruo con las damas. Pero se ha de imaginar cual es el objetivo...
¿Acaso ella es la única mujer? ¿No? Pero es la que ama, cierto. No obstante, permítase bajarla de ese altar y de tiempo a su mente, de conocer otros universos.
BL.
Joder!!! me has dejao helao, psicólogo? Ese poema o lo que sea habla de dos mujeres, la que dejé despues de 8 años de relación y jamás senti que me amaba, sin embargo yo estaba y creo que aún enamorao de ella. Se fue de mi, y al tiempo cuando se enteró que estaba con una niña (sí) Creo que por esta llevas razón en lo que dices, pero la que me atormenta es la no es tan niña y que ahora esta super enamorada y loca por mi hasta el punto de meterse en mi vida y sacar los nervios de mí. ¿Ahora si me ama? El dilema es ¿Quien me ama en realidad? Creo que ninguna de las dos, pero si me necesitan para su situación en españa, soy su protector, su padre falto, su amante excaso, pero creo que soy el utensilio que les basta para poder estar en este pais. Mi fallo? me enamoro en un desierto como dice la cancion de Manolo Garcia. La verdad es que la unica mujer que me amó, la perdí por ser un capullo mujeriego, mi 1ª mujer, mi 1er amor, la madre de mis dos 1ºs hijos. Ahora sinceramente no me fío de ninguna y aunque mi corazón sea superior a mi cerebro, en el fondo aprovecho su compañia. Un saludo.
¡Jajá!
Aguantó mucho, vaya que ocho años, son para volverse loco en una situación así.
Tome en cuenta que, al tenerlo primero y luego perderlo, es más por ego que por amor.
No creo que lo ame aquella dama, más bien está obsesionada. Efectivamente, a éstas alturas del juego, uno sabe discernir.
A lo cual, el detalle es que, después de pasar por una codependencia, nos volvemos adictos al caos. ¡Jajá!
No tiene nada de malo ser un mujeriego, el detalle es distinguir entre ser leal y ser fiel.
También soy padre, y la mayoría de los hombres que conozco, han sufrido por lo mismo. Pero terminan, como usted dice, se tornan herméticos al amor. No es que no se fíe de ninguna. Simplemente, establezca sus términos. Empezando por lo que usted necesita, lo que puede ofrecer y lo que quiere. Y no solo es aprovechar la compañía, es aprovechar todo lo que puedan ofrecernos. Un saludo fraternal.
BL.
Gracias por tus comentarios, un saludo de amistad sincera si lo desea, solicitaré su amistad. Abrazos desde Andalucia, España.
Una maravilla tu hermoso poema amigo Ermanue...
Que tengas una buena entrada de año 2015...
Un afectuoso abrazo de tu amigo:
El Hombre de la Rosa...
gracias
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