El moribundo pasó la noche en vela por miedo a no ver la mañana siguiente, y al amanecer, cuando sintió los primeros destellos de la aurora se fue cantando abrazado al sol, lejos del plano terreno, donde seguramente no habrá noches que temer.
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Autor: Alejandro J. Díaz Valero
Maracaibop, Venezuela
- Autor: Diaz Valero Alejandro José ( Offline)
- Publicado: 5 de enero de 2015 a las 10:23
- Categoría: Cuento
- Lecturas: 61
- Usuarios favoritos de este poema: rosamaritza, El Hombre de la Rosa, DELICADA ABRIL, Violeta
Comentarios4
hermoso adiós en tu poema, amigo querido, abrazos y besos amigo del alma
rosamary
Muy hermoso tu cuento amigo Diaz valero...
Un placer haber leido tus letras...
Saludos de tu amigo Críspulo...
El Hombre de la Rosa...
Un adiós enternecedor. Me emocioné.
Un afectuoso abrazo. Bea.
QUE BELLO ALEJANDRITO SENTIDO HERMOSO..BESITOS
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