Te confieso Dios amado,
frente a tu magno universo,
proclamando que tu amor
es mi mayor portento.
Mi alma se regocija
al saber que estas atento,
a la oración que tu pueblo
te eleva mi Padre Eterno.
Señor mis labios confiesan,
la grandeza de tu gloria,
como llenas de victoria
a los que esperan en ti.
Hoy confieso frente a ti,
que tu mano poderosa,
ha sido la mas hermosa
bendición que he recibido.
Así le enseño a mis hijos,
que prediquen de tu amor,
y conduzcan a otras almas
a los pies del Salvador.
No existe mas alegría,
que hablar de la salvación,
de la sangre carmesí
derramada por amor.
Por eso mi Dios amado,
elevo con gratitud
mi voz para confesar
que te amo mi Jesús.
- Autor: Emma Lores Matos ( Offline)
- Publicado: 9 de enero de 2015 a las 17:34
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 67
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Un hermosa plegaria personal amiga Emma Lores
Saludos de amistad
El Hombre de la Rosa
Gracias fiel amigo y lector, un abrazo para usted. Feliz día.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.