Me he sentado, frente a esa puerta
su oscuro lustre de madera
lleva mi mente a lejanos recuerdos.
De ese mismo color, era la puerta
que de niños nos enmarcó
te decía que me mudaba lejos
y nos confundíamos en un beso.
Ese beso primero, aún continua
quizá sean otras las bocas
pero es el mismo
que fundido a mis labios
aún continua.
Abriste la puerta
y desapareciste tras ella
quedando los ojos fijados
en ese color oscuro de la madera.
Hoy sentado la sigo mirando
curioso de la vida
que fluye tras esa puerta
y mi primer beso.
- Autor: Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de enero de 2015 a las 19:06
- Categoría: Amor
- Lecturas: 141
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Muy hermoso tu poema de amor amigo Esteban...
Un placer leer tus hermosas letras...
Un abrazo de amistad y afecto...
El Hombre de la Rosa...
Un ejercicio de memoria, mi querido amigo, he guardado cada beso, con la reverencia de un avaro, guardando sus tesoros.
Un abrazo
Esteban
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