De flores y cerezas,
capricho de dios, musa entre ternura.
Tú, alma de belleza
que emanas tu dulzura,
posees belleza, juicio y hermosura.
Ángel de la puraza,
observarte me es gozo y devoción,
musa que das presteza,
verte es satisfacción.
Tú, ejemplo de pura perfección.
En tí bellezas brillan,
a tu lado virtudes son pequeñas.
Mi dulce maravilla,
del cielo eres la dueña.
Mi dulce musa y ángel, mi alma sueña.
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Autor:
KayS (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 11 de abril de 2009 a las 08:30
- Comentario del autor sobre el poema: Se lo dediqué a mi actual musa, QUE ESPERO QUE LO SEA PARA SIEMPRE, CLARO... La verdad es que he tenido que rectificar algunas cosas, pero gracias por avisarme. :)!
- Categoría: Amor
- Lecturas: 249
Offline)
Comentarios1
Que no se entere lo de "actual" musa, supongo que querrá serlo para siempre y en forma inalterable. Muy lindo poema, ten cuidado hay algunas faltas ortográficas. Un abrazo. Ruben.
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