Así cómo yo.

Tú con tus rulos y yo aquí con mis deseos de ellos

cuántas veces no he pensado en poemas por verlos

cuántas veces no los he descrito en mis pensamientos

o, más bien, ¿Cuántas veces no me he exaltado al tenerlos?

Cómo no me he visto acorralado entre esos ojos que me envuelven y con su belleza me agarra

de tal manera que a mis letras de sus cabales saca y me las arrebata

de tal manera que mi consciencia no volvió después de perderse entre tu mirada

de tal manera que lo único que he podido hacer en torno a ella es escribirle y que me socorra pues no me deja en paz; lentamente me mata

Que por favor deje de verme fijamente porque al mirarme no me deja hacer nada

pero es porque me deja trémulo con detallar fijamente su alma

porque cada vez que la veo, cada vez que mi mente la detalla

me es imposible no pensar en la belleza que ella emana

Cada día, cada noche y cada vez que la vigilia me visita leyendo poesía

en lo único que pienso es en usted y cuanta diferencia haría

cuanta diferencia haría mi corazón destrozado

si en vez de arrebatarme el cielo, lo viviese conmigo, lo viviera a mi lado.

Pero, supongo que sólo me será un deseo más, otro deseo muerto

y que el soñar jamás me dejará estar vivo, sólo me asesinará porque formes parte de mis sueños

pero gracias por no dejar que me engulla la locura

y, que por los momentos me acompañes así cómo yo, sin cordura.