Donde quiera que tu estés
en este momento
piensa en lo que dejas
a paso de tu tormenta
escucha en el viento
este lamento
porque él es quien
la verdad te cuenta
No me moveré
ni un segundo
del lugar donde
me dejaste
por si un día
vuelves
me encuentres aunque sea
moribundo.
Regresa a mí,
que ya empiezo a morir,
de día o de noche
muero en tu recuerdo
no te pido que te quedes
conmigo
solo ven a recordarme
porque te perdí.
Si acaso fue mi culpa
perdóname
si simplemente te quisiste ir,
también perdóname
ya que si mi amor
hubiera sido suficiente
no habrías tenido
que abandonarme.
Regresa a mí, porque ya no veo
las noches llegar
los días no los siento
terminar
la luna de mi cielo
desapareció
y el sol en mi vida
dejo de brillar.
Regresa a mí,
que no te arrepentirás
seré tan silencioso
como el calmado mar y
tan paciente
como la estrella polar,
y seré esa sombra
que te sigue al caminar.
- Autor: Poeta sin Alma (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 12 de febrero de 2015 a las 01:54
- Categoría: Amor
- Lecturas: 83
- Usuarios favoritos de este poema: eclipsada, Graciano Chacon
Comentarios2
Que bellas letras escribes
un poco triste el sentir...
Espero que tu amor
regrese a ti...
y que ya nada tengas que pedir...
Que tus versos cuenten que regreso
para quedarse a tu lado!!!
Gracias, quizás algún día regrese o quizás nunca, pero lo que es una realidad es que no se fue del todo....
Vienes a mi desde el fondo de la noche
con esa luz tenue blanca como tu piel
la misma que busco a la medianoche
como el gato negro a la luna fiel.
Te quedas en un sueño, donde el tiempo no existe
con paso suave y firme la mirada
te quedas de donde te fuiste
dejando a tu alma cuerda y alocada.
No eres menos verdad o mas fantasía
porque eres parte de mi realidad
y aunque desaparezcas cada nuevo día
vuelves a renacer en mi de verdad.
porque seguro te reinvente mientras dormía.
No se si ya naciste o estas a punto de nacer
pero ya eres una recurrente idea mía
se que no te puedo perder
porque eres de mi vida, profecia.
Me miras
y mis ojos se hacen dueños de tu brillo,
mi alma te aprisiona,
y envuelve mis sentidos.
Soy yo,
un tatuaje en tu lento recorrido,
vivo y muero en tu diciembre,
mi pecado es lo prohibido.
Me sonríes
y el tiempo se detiene en tu sonrisa,
la noche de tu cabello
es mi plegaria en el silencio.
Soy yo,
y mi mente que se eclipsa con mirarte,
vivo y muero entre tus dedos,
mi pecado está en soñarte.
linda noche bella dama...
Me hablas
y mi peso se aligera por tu aliento,
un beso imaginario a mi boca deleita. ,
y mis manos que deliran por tu piel,
vivo y muero en tus caderas,
mi pecado es lo que siento.
En la biblia de mi vida
es eterno tu argumento,
en busca de mi redención,
eres tu mi salmo abierto.
La fe es la fuerza del alma, y la resistencia en el amor es la tortura, pero la esperanza no la podemos lavar como a nuestras manos, y el remedio es seguir por el camino de la espera.
Saludos poeta.
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