El sexto de diez hermanos
El destino me ubicó
Y siempre que quejé yo
De la suerte recibida,
Enojado con la vida
Viví siempre compartiendo
Los espacios y los atuendos
Que a su vez yo recibía.
Mi padre que no podía
Complacernos los caprichos
Compensaba con cariño
Las falencias materiales,
Con amor y apoyo constante
Nos enseñó otra riqueza
Que la unión hace la fuerza
Para seguir adelante.
Yo creía que era importante
Andar acorde a la moda
Pero nunca estrene ropa
Mucho menos zapatillas,
Mis valores se regían
En compartir y amar
Lo poco que nos podían dar
Agradeciendo la dicha.
…en aquellas noches frías
Que durmiendo amontonados
El calor nos iba abrazando
Hasta que el gallo cantaba,
Y mamá nos despertaba
Para ir a la escuela;
Recordando sin que duela
Pues el sol siempre alumbraba.
Mientras el tiempo avanzaba
Fui aprendiendo la lección
Que nunca tuve mejor
Maestras que mi familia,
Cuando el guiso se servia
Para todos alcanzaba
Y yo, ni cuenta me daba
Que mis padres no comían.
Con ejemplos encendían
La llama de la humildad
Obrando con la verdad
Sin esperar nada a cambio,
Seguí los consejos dados
Y hoy a mis hijos les cuento
Lo que mis padres en su momento
Con amor me han enseñado.
Ayudar al necesitado
El espíritu engrandece
Nos hace sentir mas gente
Y hasta se duerme mejor,
Por eso les digo yo
Que nunca es poco si alcanza
Compartir nos da ganancias
Que enriquece al corazón.
Alberto j armando
- Autor: alberto j armando (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 4 de marzo de 2015 a las 10:29
- Categoría: Familia
- Lecturas: 167
Comentarios1
hola, perdon, no me quedo claro tu comentario....
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