HAY UNA LUZ ENCENDIDA
(Para Hugo y para Yago)
I
Eran tiempos de soñar
con reflejos de la aurora,
con sembrar todo un trigal
salpicado de amapolas.
Y colmasteis esos sueños
de mi vida, ya incolora,
de inocentes y risueños
gestos, juegos y cabriolas.
Cambió así vuestra venida
en puro mimo y ternura
la rutina de una vida,
¡que apasionante aventura!
Recuperé hasta el sentido
de experiencias ya olvidadas,
perdidas en el archivo
de una memoria gastada.
¡Que sinfonía, que anhelo,
que ritmo tan excelente!
Al oír decir “abelo”
en el corazón se siente.
Pues creyéndola acabada,
una nueva vida brota
en otra vida apagada,
huérfana de verso y prosa
que se encarna en alegría,
y en mi alma se trasforma
trastocando en energía
la nueva esencia que aflora
y callejas retorcidas
empedradas de zozobra
se tornan en avenidas
amplias y con verdes zonas.
Esta vocación perdida
de escritor y de poeta
que reapareció en mi vida
cuando llegasteis a ella
como la lluvia caída
cala en la reseca tierra,
me ha hecho acelerar el paso
y, valga la alegoría,
me ha llevado hasta El Parnaso
con Terpsícore y Talía.
II
Os legaré como herencia
por tanto que me habéis dado
algo de gran trascendencia
que mis padres me dejaron.
Dineros no he conseguido,
ni muchas ni pocas tierras
de espacios para cultivo,
para que después se vendan
y os hagáis dos hombres ricos
en capital y en prebendas,
de igual forma que a Aladino
su lámpara concediera.
Lo que os deseo ceder
antes de que yo me muera
y vuestro" abelo" no esté
para contar historietas,
son cinco o seis pensamientos
y unas pautas que os pudieran
ayudar en el evento
que la vida representa.
Muy pronto os crecerán alas,
y a la vuelta de unos años
deseareis utilizarlas
y remontando peldaños
volaréis por la ventana,
daréis con un mundo extraño
del que no entenderéis nada.
El dulzor del nido aquel
que os acunó siendo niños
ya no lo podréis tener
cuando tiritéis de frío.
Y, justo entonces, queridos
elegiréis un camino;
elegidlo con sentido
pues será vuestro destino
y es vital no equivocarse
en la elección, hijos míos.
Y aquí os entrego mi herencia,
unos pocos pensamientos
que sin demoras ni urgencias
han de evitaros tropiezos.
Buscad siempre amigos buenos
porque la amistad sincera
es la dicha y el consuelo
conque el hombre siempre cuenta.
Cuando encontréis el amor
que en algún lugar espera
sabed que eso es lo mejor
y atraparlo sin reservas
que siendo el placer mayor
será mayor la grandeza.
Mas cuando el largo camino
se llene de duras piedras
y por azar del destino
tropecéis, fuerte, con ellas
no os deis nunca por vencidos.
Volved a la carretera,
olvidad que habéis caído,
y marchad en la carrera.
No hagáis nunca escarnio cruel
de los defectos ajenos:
si observáis con interés
veréis que así son los vuestros.
Cuando la parva esté hecha
y tengáis lleno el granero
no cerréis todas sus puertas
y tenedlo bien dispuesto,
pues vendrán, es cosa cierta,
gentes de todos los credos,
emigrantes en pateras,
cobrizos, rojos o negros.
Abrid presto la despensa
y consolad sus lamentos,
que la esencia verdadera
son los grandes pensamientos
y hay que sacarlos afuera
y esparcirlos en el viento
para que así esas banderas
ondeen en otros pueblos.
Sed buenos e inteligentes,
no seáis hombres violentos
que de violento a valiente
media siempre un largo trecho.
No riñáis por cualquier cosa
que el reñidor irredento
cuando de verdad importa
suele fallar con estrépito.
Calibrad bien lo que habláis
porque será vuestro precio,
valor mas grande no hay
y es propio de hombres completos.
Poco más os diré yo.
Si seguís estos consejos
nunca os causará rubor
lo que os diga el “alter ego”.
Pues es siempre un gran honor
sentirse, de sí, contento.
Cuando en la recta final
hagáis balance sincero
con valor y dignidad.
Antes de que llegue ¡CIERTO!
La incontestable verdad
del seguro sueño eterno,
nunca el miedo os vencerá
y os sentiréis siempre llenos
de un valor universal
Y de un sentido correcto
que vuestros hijos heredarán
y más tarde, vuestros nietos.
Viento de Levante
- Autor: Viento de Levante (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de marzo de 2015 a las 14:49
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 88
- Usuarios favoritos de este poema: Alejandro O. de Leon Soto, LUIS.RO
Comentarios3
Muy bellos versos querido amigo un poco extendidos pero no dejan de ser bellos, un abrazo.
EXCELENTE POESÍA......su contenido educativo y por ende de mucho aprendizaje me conmovió....SALUDOS
gracias amigo Alejandro por tu comentario.
Viento de levante.
Eso de "abelo" lo oigo casi a diario y es indescriptible el singular sentimiento
que provoca. Tu poema lleno de acertadas máximas al comportamiento social y personal. Bonito y muy agradable de leer. Recibe mi afectuoso saludo.
Luís, felicidades. Es algo inigualable oír "abelo", en la vocecita de un niño pequeño ¿verdad?
Viento de Levante.
Si, la mía tiene dos años y medio. Y según cuentas en tu poema, tienes dos varones, que por el idioma que utilizan, serán mas menos de la misma edad.
Enhorabuena y por nuestra parte, enseñarles todo cuanto podamos. A disfrutar de ellos, y a aguantarlos jajajaj. Un abrazo.
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