Sonríes y el tiempo se mece
con movimientos ideales,
con ritmos carnales
y el viento se estremece.
Las verdades que ofrecen
con principios finales
son remedios naturales
para tus tozudeces.
El día en que anocheces,
alegrías tras cristales,
todas buscan señales.
Sólo a ti te obedecen.
Sus ojos, sus timideces
se sienten especiales,
y sus mentes espaciales
con tu fuego se humedecen.
En sus cuerpos permanecen
los recuerdos desiguales,
los calores y los males
que tienen cuando apareces.
En pasillos jugando ajedreces
con fichas superficiales
en las que vuelves reales
todas sus insensateces.
¿A qué dioses perteneces?
¿A qué clase de inmortales,
que haciendo cosas tales
a las fieras adormeces?
- Autor: Nox (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 15 de abril de 2015 a las 02:13
- Comentario del autor sobre el poema: Espero que os guste, como siempre. Si además podéis pasaros por mi blog http://opuestosimantados.blogspot.com.es/ y dejadme algún comentario con vuestra opinión sería genial, sino gracias por pasaros por aquí. Un abrazo fuerte.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 47
- Usuarios favoritos de este poema: JAS el poeta nocturno
Comentarios5
Que rico poema! me agradó.
¡Gracias! 🙂
Tu rima es musical como un Lampo y tu prosa acurruca mis sentidos con incomparable delicadeza...Un tierno abrazo de felicitaciòn por esos versos tan bellos, armoniosos y encantadores...
Muchas gracias por tu comentario. Me alegro que te haya gustado 🙂
Un gusto y un placer leer tu preciado poema.
Un feliz día.
Muy bello y sentido tu poema de amor.
un cordial saludo.
Santiago
Excelente poema. Felicitaciones
Gracias por compartir. Saludos
Gracias a ti por leerme. Un abrazo, compañero.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.