Carta al dolor.

Hace mas de 115 noches que no pronuncias un Te Amo. He tratado de olvidar cada mañana el dolor que eso me causa pero la energía y el propósito de olvidar se me agotan con las horas, y a medida que llega la noche lo recuerdo con más dolor. Pueden existir muchas razones para que ya no seas capaz de mencionarlo o tu corazón, quizá, haya olvidado que valor tienen esas dos palabras. Te miro cada día con la esperanza de un nuevo amor, de un amor más puro. Pero pasan los minutos, las horas, los días y todo sigue igual. No puedo contener nada. No puedo sacar este amor que siento por tí. Me obligas a quererte y yo deseo amarte. Esto es una carta al dolor, por si no lo haz notado el tiempo juntos se nos agota porque siento que el amor no crece. Siento que esta estático y no hemos llegado al tope.

Te quiero ver diferente pero entonces es que ¿no te amo? Creo que amo los recuerdos no la persona que eres ahora. Amo lo que solías ser. Se que tuve mucho que ver. Pero yo he sabido perdonar cada tropiezo cada vez más grande. Me acabo de frenar con una frase de Sartre: “Aquello que cada uno de nosotros es, en cada momento de su vida, es la suma de sus elecciones previas. El hombre es lo que decide ser.”

¿Qué será de ti entonces cuando ya no pueda amar sola? Te desconozco. Te amo demasiado como para obligarte a amarme pero no sabes el dolor tan grande que tengo en mi corazón te tengo muchas noches durmiendo en mi pecho, acariciando mis caderas con mucha pasión y cuando todo se acaba entran las ganas de llorar, la ausencia de amor me hace sentir inútil, despojada. Quiero olvidar este amor pero no puedo. Ojalá algún día puedas ser libre de tus miedos y puedas volver a sentir la sensación más hermosa que es amar...