A esas aves que por el cielo vuelan,
A esos seres que en el aire se divierten,
A ellos que con cantos al campo despiertan,
El hombre, sin razón en nada los convierten.
Los encierran como si fueran criminales,
Los convierten en infelices mortales.
Las aves merecen un mundo de libertad,
La luz del sol también les pertenece a ellas,
El cielo es su territorio de verdad
Al igual que para luna y las estrellas.
Sus bellas alas de adorno no las tienen,
Pues con ellas suben y bajan cuando quieren.
Grandes y pequeñas y son todas perfectas
Y un hogar imperfecto le queremos brindar.
Vemos que en el cielo están todas contentas
Y en varillas de hierro las queremos encerrar.
Cortamos sus alas como si fueran papel,
Cortamos la esperanza de un feliz amanecer.
De oriente a occidente y de norte a sur,
Desde lo más bajo hasta lo más alto;
Pueden ir de Colombia a Singapur,
Van al cielo, Van al mar y a su encanto.
Dependen de Dios, son felices así
Y adornan el cielo para ti para mí.
- Autor: Fabián Cuadros (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de mayo de 2015 a las 19:54
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 2155
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