Entre bellas cosas
Tú y tu nombre y Piazolla revolcándose en el suelo. Como un enfermo de muerte, proclamando la belleza de la vida.
Eres el cielo que se quiebra en el pozo de un asfalto.
El último cabello de la hembra más hermosa del mundo.
Mi lamento, el epílogo de mi llanto.
La vértebra que sostiene mi tristeza
y la colma de sueños.
Como la huella dactilar de un ciego
sobre la cabeza de su madre.
Y todo el mundo acostumbrado
a hablar del amor
como si fuera un clero alzado
entre los pobres.
Y todo el mundo acostumbrado,
a hablar del amor,
con su cabeza sorda
con el melodrama de la vida
circunscrita en el primer beso.
Eres la metáfora del amor
de cenizas que quiebran la luna
y marcan,
el fin de una entelequia.
Mi corazón
mi corazón tiene a un hombre arrodillado
que me sostiene en lo alto
y sigue esperando
tocar, por primera vez
mi mano.
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Autor:
Sara (Bar literario) (
Offline) - Publicado: 27 de mayo de 2015 a las 15:20
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 122
- Usuarios favoritos de este poema: la negra rodriguez, Angel irredento, Carkis Mol Cru
Offline)
Comentarios4
Todos hablamos de amor, pero lo importante es dejarnos tocar de su magia y sentir que inspira nuestro corazón.
interesantes tus versos poetisa
Querida paisana siempre me dejas cavilando con la profundidad de tu poesia. mew guastó en especial la tultima parte del poema.
besos
El amor nos toca el corazón como lo hacen unas manos bien entrenadas cabalgando acompasadas sobre la melodía de la vida y cuando nos abandona nuestra alma se quiebra y desafina. Bonitos versos.
Una inspiración excelente y muy bella, donde suenan los versos como piano melodioso. Buen poema... Sara.
Me ha gustado.
Saludos de Raf Mol
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