Ayer la última nube del invierno
los terrenos sombríos empapaba
–lodosas noches no creyeron nunca
volver a ser motivo de nostalgia.-
Lejos; muy lejos entre blanca bruma,
ausente ahora el caminante vaga,
ya complacido al cien su buen deseo,
su luz de término la vida traza.
Soy yo tal caminante que en el sueño
–en la agonía que el amor depara-
muere distante, solitario y triste.
Como una lluvia breve la fragancia
de mi ser loco se trocó en tinieblas
y al aire el humo blanco de mi alma.
- Autor: Marcos H. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 28 de mayo de 2015 a las 01:23
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 78
- Usuarios favoritos de este poema: Esteban Passalacqua
Comentarios4
Bello poema amigo tiene en sus versos el alma del caminante tras lso vestigios de su vida
besos
Eres buen poeta, felicidades por el soneto
- ¡GRAN soneto, GRAN poeta!
- Un abrazo.
Fue un grato encuentro con la poesía, lo haces muy bien estimado poeta. Un cálido saludo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.