La noche más triste, se desgarra las bóreas,
del frío; como el hálito parco de la muerte del cal
va mofándose ciega en su hábito sepulcral,
pena de mujer, pena náyade, dejame detrás.
Muere ya corazón! Y no cantes responsos de olvido
cerberos, llantos que abortan desvelos
huérfanos de un muerto Edén prometido.
Mi corazón es triste, apartado y lejano; llueve
en el negruras lúgubres de espanto,
basiliscos venenosos suben por mis venas
¡no! corazón...Ya basta, silencia tu canto.
Muere ya corazón, un dios tal vez me maldice,
¡Muere ya corazón!
en mi pena. Orfeo va llorando a Euridice.
Corazón muere!
Derechos reservados de autor
John Morales Arriola
- Autor: John Morales (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 30 de mayo de 2015 a las 10:19
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 120
- Usuarios favoritos de este poema: Violeta, la negra rodriguez, María C.
Comentarios9
PENUMBRAS E INSERTIDUMBRES.
HOY TU VERSAR ESTA CON ESE TOQUE ISOLITO
CON UNA DESEMBOCADURA DE TRISTEZA
Y UNA PENA MUY DESOLADA Y PROFUNDA…BESOS
Me gusta como desgranas las penas en tu hermoso poema.
Un saludo Shira
Si en los versos con métrica eres grande , mpas en estos donde dejas volar el sntimiento. Me encantó que sutil manera de liberar tus letras.
besos.
Cuando hace mucho que no brilla el sol, el alma se desespera y clama por calmar su frío interior. Un poema libre pero de gran poder emocional.
Un placer para mí leer lo que publicas.
Saludos y buen fin de semana.
A veces se huye del amor de antaño, se quiere ser prófugo, y sin medida a cuesta cae en el infierno, y la euforia no es prudente, y se roza el hálito inmerso en lagunas quemantes y de tormentosos decibeles, esa acústica es suficiente como para despertar las entrañas, y quizás ese embrujo del pasado, y luego viene la nostalgia, y en un letargo oscuro la melancolía,
en sí, tu poesía es tranquila...
Me ha agustado tu poema, me llena de pensamientos que llegan más allá de lo que soy...
Ahí, por eso voy "la muerte", es la que se busca...inconcientemente...
Saludos cordiales de Rafael
Amigo y compañero, qué más le puedo decir, un poema siempre de su altura, que con gusto y sabor se leen.
Reciba mis saludos de amistad, un fuerte abrazo.
Muere ya corazón que los dioses
tal vez me maldicen, muérete y
déjame libre.
Un poema que tiene garra.
Un saludo sincero
kitty
Bellos tus románticos versos.
Un abrazo
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