No es la luz,
ni son esas alas
de melancolía
las que hacen recordarte.
Ni siquiera
es la triste oscuridad
que por la noche envuelve.
Es dejarme
caer por la ventana
para ver la dimensión
de tus labios.
Es ser luz de la mañana
entrando en tus ojos.
No es el olvido
recurrente del ayer
Ni la más cruda enfermedad
que padezco al no tenerte,
nada hará que te olvide,
ni la lagrima más vibrante
hará que deje
de llorar por ti.
Mas el lamento amargo
me saca de mis
pensamientos remotos
y me ayuda a decidir
que no quiero
ni deseo vivir,
ni un día
sin tenerte cerca,
un día
sin amarte,
un día
sin ti.
ni son esas alas
de melancolía
las que hacen recordarte.
Ni siquiera
es la triste oscuridad
que por la noche envuelve.
Es dejarme
caer por la ventana
para ver la dimensión
de tus labios.
Es ser luz de la mañana
entrando en tus ojos.
No es el olvido
recurrente del ayer
Ni la más cruda enfermedad
que padezco al no tenerte,
nada hará que te olvide,
ni la lagrima más vibrante
hará que deje
de llorar por ti.
Mas el lamento amargo
me saca de mis
pensamientos remotos
y me ayuda a decidir
que no quiero
ni deseo vivir,
ni un día
sin tenerte cerca,
un día
sin amarte,
un día
sin ti.
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Autor:
Poeta sin Alma (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 30 de mayo de 2015 a las 10:45
- Categoría: Amor
- Lecturas: 137
Offline)
Comentarios1
Tristes lamentos por el amor ausente,bellas como siempre tus letras.
Un saludo Shira
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