De que me sirve ahora el indefenso nombre
porque he de reconocer que mi lucha fue vana
las playas que forjamos se fueron con la tarde
y la pugna en que vivo es cada vez más cruenta
Buscaba los canarios que salvarían mi mundo
escapando a los desastres de pérfidos augurios
ignoro cuanto pesan los espectros nocturnos
allí en el manicomio de hambre y precipicios
Desterramos la fiebre sin fecha en las estrellas
con los duendes paternales que en esta parte moran
doy vueltas en elipses buscando tus memorias
pues de mi ruido el silencio borrará las huellas
El campo en la tibieza del blanco sol, dormita
cuando llega la noche ya el cielo es un sollozo
como el perro callejero que en todas partes habita
o como aquel niño que juega brincando de gozo
Colgándome los brazos de las últimas estrellas
esfumándose en la nada al llegar la madrugada
hoy quisiera poder ahogar mi llanto con la risa
más mis penas no se van no tienen ninguna prisa
- Autor: alejandro guardiola ( Offline)
- Publicado: 1 de junio de 2015 a las 09:32
- Categoría: Amor
- Lecturas: 53
- Usuarios favoritos de este poema: pani, Edmundo Rodriguez
Comentarios2
HERMOSO POEMA ...UN GUSTO LEERTE ALEJANDRO...
Gracias PANI amigo, una niña muy linda sale en tu foto que está en tus brazos es tu hija porque es guapisima
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