Mi cielo nada tiene que ver con las estrellas
ni tan siquiera mención hace con dios. Mi mundo
lo construye este sentir grandioso y tan profundo
como lo es el placer de gozar de cosas bellas.
Que el derecho a ser feliz no exige volar alto
pues basta con proyectar nuestra alma en el espejo
andando hacia adelante y obviando ser reflejo,
los pasos dando firmes, sin miedo al sobresalto.
Mi cielo es tan sólo mío y no lo presto a nadie,
no tiene justiprecio, por eso no lo vendo,
con nadie lo comparo mas a otros no desprecio.
Me doy por satisfecho con que bonanza irradie.
Y pues que este negocio me renta un dividendo
le tengo un gran amor y profeso un gran aprecio.
©donaciano bueno
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Autor:
donbuendon (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 24 de julio de 2015 a las 00:07
- Comentario del autor sobre el poema: Siempro buscando el cielo por todos los lados y lo tenemos tan cerca.
- Categoría: Fantástico
- Lecturas: 32
- Usuarios favoritos de este poema: pani, Claro de Luna
Offline)
Comentarios3
El cielo es nuestro techo, y el que cada uno se pone buscando la felicidad y el bienestar consigo mismo, es una reflexión que hago al leer tus letras.
Un abrazo Shira
preciosos alejandrinos para aclamar tu cielo "gozar de las cosas bellas"
cuenta conmigo.
Ayer mirando la luna; observé hallé el cielo real, y curioso, no tiene ni arriba, abajo, derecha e izquierda; todo es cielo, cielo. Y yo era un punto pegado a una enorme bola (por efecto gravedad) que siempre veía la luna arriba. Y pensando que podía estar mas abajo que yo, llegue a la conclusión dicha al inicio, que el cielo real, todo es cielo. Su atrayente luminosidad azul nos inspira cielos de ilusiones individuales.
creo yo. un abrazo Donaciano
Gracias, amigo Luis, por tu adjetivación.
Gozar de las cosas bellas es el único cielo real, conocido. Los otros, quién lo sabe.
Mirar al cielo en una noche clara, como tú lo has hecho, es uno de los mas emblemáticos espectáculos de la naturaleza en los que uno se siente tan dminuto y nos proporciona una cura de humildad.
Un abrazo.
Muy lindo, solo estirar la mano... y allí está.
Efectivamente, basta con estirar la mano....o la mente.
Un abrazo
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