Huele por la estuosa muerta
detrás de la ájida vida
con trapecios.
Florece al débil y fuerte
en una piedra fingida
de los necios.
Vienen látigos bordados
de inmanimos mausoleos
encantados.
Hieren hondos mis costados
con tiempos de fariseos
encarnados.
Habla de muerte mortal
escupe la sangre roja
que murmura.
Cuaja la arteria final
que tu sepultura moja
con locura.
Tuétanos y coyunturas,
de renegadas arterias
nos vestimos;
triste como las negruras
que entre nüestras miserias
nos morimos.
Crepúsculo de armonía,
alvéolo fugitivo
moribundo.
Rubor de furioso espía
hasta cavilando vivo
dejó el mundo.
¡Niños! idos de una vez
de los terrenos de Hades
poderoso.
¡Ya! marcháos del revés
y de sus propias edades
del caloso.
Derechos reservados de autor
David John Morales Arriola
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Autor:
John Morales (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 17 de junio de 2015 a las 07:38
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 108
- Usuarios favoritos de este poema: Alejandro O. de Leon Soto, Hugo Emilio Ocanto, la negra rodriguez, María C.
Offline)
Comentarios8
Genial tus letras, hipocresía inconformidad.
Un saludo Shira
Excelente...!!! Apreciado amigo, un gusto leer de tu estro y pluma.
Saludos cordiales.
Gran placer leer tus bellas letras, John.
Mis saludos, poeta.
Hugo Emilio.
Como siempre un excelente trabajo.
Saludos.
Profundo poema enmarcado es si que es arte-.
besos.
Es que me quedo sin palabras pero diré en mayúsculas !! BRAVO¡¡ Cómo escribes muchacho.
Un saludo
kitty
Hermosos tus crudos versos poeta.
Un abrazo
......Vienen látigos bordados
de inmanimos mausoleos
encantados.
Hieren hondos mis costados
con tiempos de fariseos
encarnados.............excelente tu poesía John.
saludos amigo,
David
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