!Pobrecito mi amor! que enfermo
estaba y Dios me lo salvó. El
Dios de los cristianos al que
tanto amo yo. Me enseñaron mis
padres, me enseñó mi profesor;
me enseñaron a quererlo y a
conocerlo mejor. Gracias a
a los misioneros que van por el
mundo enseñando a conocer a
nuestro Dios. Creo que es el
verdadero, el que siempre me cuidó
con un amor inmenso. Eso es lo
que creo yo.
- Autor: amor c.l.s. ( Offline)
- Publicado: 25 de junio de 2015 a las 10:21
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 49
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.