No quiero que te empapes con las gotas de lluvia. Recuerda que una vez (sin predecir el futuro) te mojaste tanto que tu ropa iba desapareciendo lenta, iba resbalando como huella en una roca. Tu boca te hizo una cascada para encubrir el camino manchado por el agua y describí mis besos sobre tus hombros como relampagos cautivos, puntiagudos para deslumbrar tu mirada y que vaciles al cerrar tus ojos en un deseo microbio al entrar en tus poros y así pellizcar tu sangre con mi saliva hirviendo secarte por dentro, cicatrizar tu aliento con mis dedos o hacer cualquier cosa para que no corras huyendo hacia la tormenta. En este lapso donde pensé esto decidiste quedarte, tomar un café y ver por mi ventana como las gotas morían escurriendose estrelladas una sobre la otra, sin parar. Ya pasan de las tres de la mañana.
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Autor:
Arturo Enriquez (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 14 de abril de 2009 a las 14:13
- Comentario del autor sobre el poema: .Tiempo e imaginación. Se detiene para descubrir lo que nos hace falta vivir.
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 58
Offline)
Comentarios3
las tempestades del amor, seguiré atenta por si hay una tercera letra de amor, me ha gustado mucho Julio sobre todo esta parte:
Tu boca te hizo una cascada para encubrir el camino manchado por el agua y describí mis besos sobre tus hombros como relampagos cautivos, puntiagudos para deslumbrar tu mirada y que vaciles al cerrar tus ojos en un deseo microbio al entrar en tus poros y así pellizcar tu sangre con mi saliva hirviendo secarte por dentro, cicatrizar tu aliento con mis dedos o hacer cualquier cosa para que no corras huyendo hacia la tormenta.
Mucha imaginación implicada. Pero en la mente uno puede hacer y deshacer el mundo en un segundo. O quizá sea una forma de describir lo vivido ya?
Saludos,
Alfonsina G.
Que forma de ver a una mujer bajo la lluvia, me gusto mucho usas imagenes muy padres. Me gusto todo Felicidades
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