Por que cuando abrimos la puerta de la vida,
estábamos esperando…
Cuando buscábamos la libertad
nos tropezamos frente a frente.
Mi alma siempre paseó por tu mirada
y frustramos siempre las sombras
que quisieron dañarnos…
jamás reprimimos la rabia ni las alegrías.
La luz de tu alma
siempre iluminó mi esperanza.
Juntos lloramos las ausencias
al igual que los regresos…
Me mirabas y olvidaba los enojos,
derrotamos las carencias de proyectos
y fortalecimos las esperanzas de vida.
Nuestras infancias se vistieron
de similares colores,
siempre imaginamos sueños
con voces no escuchadas…
con inocencia mirabas la efigie
hasta que por sus ojos brotaran lágrimas.
Cómo no me iba a enamorar de ti amada mía,
si tu calma era tibia y mi prisa ardiente.
Tu boca llena de apetito y sabores
y reías por tus ojos, siempre por tus ojos reías…
esos ojos más azul que los azules.
Jamás una carta destrozada ni esfuerzos cancelados,
bailábamos bajo la lluvia
y al besarte masticaba mieles…
te pedí luz:
y me regalaste todas las estrellas del cielo.
- Autor: juan f bravo lira ( Offline)
- Publicado: 7 de julio de 2015 a las 10:46
- Comentario del autor sobre el poema: ... momentos de mi vida!!
- Categoría: Amor
- Lecturas: 87
Comentarios1
Que hermosura de poema cantado a la mujer amada
Gracias por tu comentario poeta!
Saludos cordiales!!
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