Imagina a alguien que una gruesa piedra lanza
a un tranquilo estanque de límpidas aguas
y ocasiona sólo una leve onda en su haz,
como si fuese una gota de rocío matinal
que un húmedo lirio suelta sobre el agua calma:
lo mismo causan las grandes tribulaciones al alma
de aquel cuyo único apoyo en Jesús está.
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Autor:
Juan de España (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 7 de julio de 2015 a las 12:35
- Categoría: Religioso
- Lecturas: 60
- Usuarios favoritos de este poema: Jony Alba LVDS, Edmundo Rodriguez
Offline)
Comentarios1
Un tema muy hermoso
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