Hundidos en la miseria creada por el mismo hombre,
Muertos vivos; somos sólo materia sin sentido, sin propósito.
Muerto el hombre todo vuelve a la vida
Dios está vivo, el hombre muerto.
El hombre muere en el momento que nace,
Su muerte más cerca está de él. Gritos en su mente.
¿Cuándo muere el hombre?
Muere cuando se da cuenta, cuando piensa, cuando razona
Empieza a morir en el momento en que nace al conocimiento
Su alma comienza a decaer en el conocimiento
En ese momento es corrompida por una idea absurda
Su característica de hombre lo hace mortal,
Mientras más conoce más muere, sus descubrimientos le hacen mal
Sus hallazgos lo asesinan.
Ellos mismos lo hacen, porque el hombre no está feliz si el otro no está muerto
Muertos aún andamos en busca de un pedazo de carne humana que devorar,
En busca de un hedonismo sádico, ávido de tener más, de poseer más.
Simplemente morimos para vivir, vivimos para pensar y cuando pensamos morimos
Y así se repite y así se cumple el ciclo.
Rompemos con el sistema inventado por Dios
Corrompidos y muertos por el placer del conocimiento y la sed de la sangre espumosa
De un viejo ángel.
- Autor: Alejandro Rico (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 30 de julio de 2015 a las 10:09
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 36
- Usuarios favoritos de este poema: kavanarudén
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