Has vivido en mi alma,
Has corrido en mis venas,
Tus enormes cadenas,
Me ha dolido cargarlas.
Te hieren los malditos
Sin poder evitarlo:
Ya el destierro es mas largo
Y el tiempo mas finito.
Mientras lloras tus penas
Tus hijos divididos:
En afrentas y oprobios sumídos,
No actúan como colmena.
La vida te ha golpeado;
Culpable ha sido: de un mal hijo el ego,
Equivocada medicina que tomaste,
¡No era para tu bien, era un placebo!
Ya el tonto útil de bastardos intereses,
Llevó a la ruina todo lo logrado,
Tu bello futuro enajenado;
Y sumído en profundas lobregueces.
Hoy, los mismos intereses ya conformes,
Al verte destruida y sin amparo,
Quieren que coman el plato de lentejas
Sentándose a su mesa, los malvados.
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Autor:
pupykuba (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 14 de agosto de 2015 a las 21:15
- Comentario del autor sobre el poema: Ya pueden, sin temor, sentarse en la misma mesa.
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 636
- Usuarios favoritos de este poema: Peregrina, Trovador de Sueños ...y realidades.
Offline)
Comentarios1
Contundente y verdadero... y mucho de eso hay en este mundo, apreciado amigo.
Saludos cordiales;
Carlos
La triste realidad, amigo poeta. No podían permitir que Mi Isla Bonita fuera lo que habían planeado, "el mayor emporio turístico del mundo". Hoy ya pueden darse el lujo de permitir alguna apertura, para, sin tomar en consideración la libre voluntad d e su pueblo, incursionar invirtiendo en provecho propio.
Te mando un abrazo.
Jesús.
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