Aviso que he vuelto después de muchos años ausente.
Patria: qué me importan tus años
tu riqueza y tu hermosura,
qué me importan tus desdichas
y tus esperanzas rotas,
qué me importan los mercaderes
que te han desgastado hasta
el riesgo de exterminio,
qué me importan los mentirosos
de oficio que se venden al mejor
de los postores,
a mí solo me importa que eres mía,
aunque no tenga una escritura
que me ampare ser tu dueño.
Eres mía porque vives en cada mineral
que se disuelve en el líquido viscoso
que se llama plasma, y en cada molécula
de azúcar que he extraído glotón
de tus cañas y tus dulces garapiñados
y charamuscas, que me ganaron
los puntos negros de mis caries
en los dientes de leche. Los minerales
y sustancias que te devolveré
cuando me envuelvas con tu bendita
tierra como me envolvió el vientre
de mi madre antes que naciera.
Para mirarte y sentirte saldré
del interior de mis entrañas por
los poros en una metamorfosis sudorosa,
y en el vaho que exhalan mis pulmones,
al tiempo que empujan hacia adentro
el sonido de metales y tambores,
o los colores y el brillo de la pirotecnia
que estalla en millones de truenos
pequeñitos con destellos azules y rojizos,
y el resplandor de los rayos de sol entre las nubes.
Báñame en tu lluvia, anégame en tus ríos,
cúbreme de selva en la espesura
de tus bosques y vísteme con plumas
de quetzales, dame la agilidad del ciervo
y la fuerza del jaguar. La nobleza del potro
y la altivez del ave. Deja que recorra
tus enclaves, tus riberas y tus playas,
deja que duerma en tus volcanes.
Y juegue hasta dormirme en las planicies
del Bajío, removiendo los barbechos
que se hicieron para sembrar maíz y trigo.
Deja que escuche el tañer solemne
de los bronces aunque no vaya a misa;
que yo me postro en otro altar,
y Otro es mi Padre. Pero recuerdo aun
el repique de campanas que desde
Catedral sonaban cuando llegaba en taxi
al Zócalo siendo un chaval. ¿Chaval dije?
Pues claro, a qué presumir de náhuatl
diciendo xocoyotzin, si el náhuatl nunca
ha sido para mí lenguaje conocido.
Aunque no me afrento de mis indios,
qué más quisiera yo que haber nacido
sin mezcla de sangre, mas a qué engañar
mis sentidos, si más castellano
no podía ser mi apellido.
¿Acaso dije: "mis indios"? Pues claro:
¿O es que nací en Europa? Digo míos
porque soy suyo y no al contrario.
Como resulta que llamo a la Patria: mía y suyo soy.
Que lo pequeño pasa a ser
posesión de lo más grande.
Como llamo al Poderoso Creador: mío
siendo de Él y no al contrario.
Que el Estado y su Gobierno no son míos
aunque según la Democracia: Estado y Gobierno,
son de todos, y mío también al ser mexicano.
Más qué hacer si la Soberanía Nacional
no es de los mexicanos ni es de nadie
sino de aquel que tiene el gobierno
del poder y del dinero; aunque haya nacido
en Wisconsin o en Madrid.
Y, sin embargo; eres mía y yo tuyo. ¡Patria!
Porque te llevo cargando desde que aprendí
a quererte bajo la forma tricolor de una bandera,
y un águila devorando una serpiente.
Porque muero de rabia y de vergüenza
cuando miro tanto "jijo" desgraciado que te depreda,
mamando sin saciarse las entrañas.
"Viva el bicentenario de la Independencia",
"Vivan los héroes que nos dieron Patria"…
¡Qué descaro! Mientras la realidad es
que mueren tus hijos, entretanto
vive el despilfarro y la rapiña.
Y sin embargo ¡Patria!… Tú siempre serás mía.
Y de todo aquel que te ame como se ama.
Como debe de ser: sin codicias, ni mentiras.
- Autor: Carlos Cabonaro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de marzo de 2010 a las 02:09
- Comentario del autor sobre el poema: Los grandes intereses políticos y económicos podrán quitarnos todo, menos nuestra propia identidad. Celebramos doscientos años de independencia y libertad, muy relativas...
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 95
- Usuarios favoritos de este poema: silviagarza
Comentarios3
HE LEIDO TU POEMA....
UN BESO Y UN DIEZ A TU POEMA..
Y sin embargo ¡Patria!… Tú siempre serás mía.
Y de todo aquel que te ame como se ama.
Como debe de ser: sin codicias, ni mentiras.
Santapau. Saludos un gusto recibir la notificación de tu lectura, una disculpa por no haberte respondido antes. Seguiremos encontrándonos en este espacio luego.
Shalom
Shalom, hermano mayor en la fe.
Mi amigo querido, te saludo desde el fondo de mi corazón, que desea al tuyo toda la paz y toda la armonía que sea capaz de acumular, que, estoy segura, es TODA.
¡¡ Qué maravilla leerte !!
Hace un año, escribí algo para las fiestas patrias, que habla de Mi Patria, Mi amor; y desde entonces empecé en el intento de escribir algo para esta conmemoración que vivimos. Doce meses pasaron, querido Carlos Fernando, y todo lo que podía expresar era tan amargo, tan doloroso, inclusive tan cruel, que decidí escuchar el proverbio chino de que "...si tus palabras no valen más que el silencio, mejor no las pronuncies..." Y no fue cobardía, ni apatía, fue dolor, intenso y profundo dolor por mi Patria, mi Amor. Todavía tengo mucho resentimiento, mucho rencor que procesar, y lo digo con tristeza, pues a través de mi vida he ido tratando de siempre limpiar, de no dejar envenenar mi alma con negatividades, pero aún no he podido superar siquiera la "conquista", la gran masacre, la gran devastación.
Por eso, hoy que, un poco tarde (nunca es tarde cuando la dicha es buena, verdad?) llego a tu poema, me maravillo, me congratulo de que alguien pueda expresarse como tú lo haces, con esa fuerza y esa claridad.
Y sobretodo, me regocijo de ser tu amiga, pues desde las primeras lecturas que hice de tu obra, me causó fuerte impacto, y al ir descubriendo la magnífica persona que eres, te tomé gran estimación.
Hoy te reitero mi estima, y con orgullo te digo ¡¡ Sí tenemos que celebrar !! Tenemos Patria, tenemos Historia, tenemos rumbo, y tenemos fe.
Silvia.
Shalom Silviagarza.
Leo tu comentario, y después de muchos meses de no asomarme a Poemas del Alma, lo que lamento ahora, es no haber correspondido antes a tus sentidas palabras, y haber descuidado tu amistad y no haberte respondido antes. Espero que la generosidad de tu corazón, sepa disculpar mi descortesía. Y creeme, el mejor premio que puedo recibir, es saber que lo que modestamente escribo con el corazón, pueda hacer vibrar el corazón sensitivo de mis amigos.
Me comprometo a vistarte en tu página muy pronto.
Gracias por tu amistad.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.