La calle es un lago gris
que dormita su ironía,
pasto de melancolía
bajo un cielo sin matiz.
El tiempo es un infeliz
gorrión sobre los tejados.
Los sueños agazapados
se vislumbran en la acera;
un hombre en silencio espera
por una suerte de dados.
La calle es un lago gris
que dormita su ironía,
pasto de melancolía
bajo un cielo sin matiz.
El tiempo es un infeliz
gorrión sobre los tejados.
Los sueños agazapados
se vislumbran en la acera;
un hombre en silencio espera
por una suerte de dados.
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