No te espero,
Esperarte envuelve espacio y tiempo
No te extraño,
Extrañar envuelve plenitud y encuentro
Y no, no te espero...
Mi tema en la espera es precisamente
un espacio que me quema el llanto
Es un hito que afianza mi presente
Un tiempo que no enferma el pasado.
Yo dedicada a la voluntad de enredar
entre besos, caricias y gratos miedos
Mi ser, mi luz, mi sendero.
Y no, no te extraño...
La plenitud me hizo verbo en infinitivo
palpitaba en mí el descanso de los sueños
donde apenas empezaba mi bisoño centelleo.
Yo haciendo el amor conmigo,
Escena de libar el legítimo encuentro
donde posé inocencia y madurez,
ambos con fecha de vencimiento
Y tú, siempre ausente
Como en algún momento fue escrito.
La ausencia no es más que por la presencia,
es aquello que no se debe a tu ser de forastero
-Extraño viajero en mi máquina del tiempo-
Es lo que ahora resta por escribir
mi presencia, yo en mí, mi eternidad de momento.
Pero ¿cómo no?
Cómo no extrañar únicamente la forma,
la espera de esa muerte lenta.
Avivada envolvía lo fugaz de los sueños
la muerte que resolana dejaba en las miradas,
en cantos de los dos, a la par, un invierno
Abrigaba bien el café para departir
con tu presencia, tú -donde prefieras-, tu eternidad de momento.
- Autor: Aeé (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de septiembre de 2015 a las 03:15
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 47
- Usuarios favoritos de este poema: el poeta del abismo
Comentarios1
Psicodelico, excelente.
Un gusto leerle.
Saludos de amistad.
Psicodélico... 😀
Saludos afectuosos
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