Rayo malversado de silencio
y de pálida tormenta anacarada,
castillos de almenas coronadas
en el espéculo dorado de mi alma,
y en la agónica tarde de mis caricias
enardecidas flores atravesadas...
en el archipiélago abandonado de cariño
de la entristecida cadena que me ata...
en los campos muy malheridos en su destino
las mariposas acarician muy despacio
con el roce de sus alas...
los corazones muy malheridos de silencio
de las atalayas melancólicamente enardecidas
de mi alma enamorada.
AUTOR: JOSÉ A. PANIAGUA MARTÍNEZ
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Autor:
pani (
Offline) - Publicado: 26 de septiembre de 2015 a las 16:56
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 45
- Usuarios favoritos de este poema: Alexandra L, el poeta del abismo, María C., David Arthur
Offline)
Comentarios4
Hermoso amigo querido.
Silencio elocuente y profundo.
Un gusto leerte.
Kavi
Gracias mi buen Kavi...cordiales abrazos y feliz fin de semana....
Hermosa entrega pani, versos delicados como mariposas que acarician el alma. Siempre grato disfrutar tu poesía.
Un abrazo, que tengas una excelente tarde, Alexandra.
MUCHAS GRACIAS ALEX POR TU HERMOSO COMENTARIO...QUE DIOS TE GUARDE Y LAS MUSAS TE PROTEJAN...
Es triste, pero ya sabes que dentro de la tristeza, a veces hay muchísima belleza, ese es tu caso.
Un abrazo
.....en los campos muy malheridos en su destino
las mariposas acarician muy despacio
con el roce de sus alas......pero este rayo es de un silencio muy hermoso pani.
Un abrazo amigo,
David
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