Desde mi isla

Desde mi isla

Viajando un día la tormenta nos trajo aquí,

sobrevivimos porque nos teníamos los unos a los otros.

Al pasar los años,

se intentó construir, no una casa mas bien un hogar,

se intentó construir, no un muro mas bien seguridad,

se intentó construir, amistad mas bien confianza,

yo, niña simplemente no comprendía, sólo vivía como se debía ser.

al cabo de tiempo la piel marchita y los adultos se hacen mayores

y por aquí sólo estoy yo...

la isla se hace más grande 

y comprendo,

que si puedo buscar puedo encontrar

que si reparo el tejado, la lluvia no mojara el interior

no son súper poderes es supervivencia.

Desde mi isla,

entiendo, que no se puede estar sola, 

entiendo, que si construyo una barca, quizás y sólo quizás salga de aquí.

Intentando una y otra vez desde mi isla no se puede salir,

existen días que se divisa algo,

existen noches que la luz de alguna estrella me confunde con vida.

Desde mi isla

un día...

un día...

un día... tiempo atrás llegó alguien hermoso y me sonrió,

tantos años sin hablar,

tantas lunas sin compañía,

tantas horas en soledad, sin comprender, sin asimilar 

que aquella tormenta que nos trajo aquí, había cambiado el "destino".

sin hablar  me quedé mirando esos enormes ojos,

sin hablar mi corazón adolescente gritando estuvo frente a él,

sin hablar quería  tocar sus manos,

sin hablar lo observaba brillar,

sin hablar intentaba decirle "un te quiero, un te amo, un ayúdame"

sin hablar, sin hablar, sin hablar...

apenas salió de mi boca una palabra, una estúpida palabra "amigo" y el nudo de la garganta se volvió a cerrar,

sin hablar  no pude decirle quédate...

sin hablar me quede mirando como se alejaba,

sin hablar parada tampoco él hizo, ni dijo nada,

sin hablar estoy aquí... en mi isla, como siempre, como ha sido siempre desde el día de la tormenta que me trajo aquí

y arrastré conmigo lo que no quise arrastrar

a

A veces escribo cartas al mar por si vuelve alguna vez,

se olvido la sonrisa que dejó sin querer.

¿Habrá crecido como yo?

¿Habrá sido adulto ?

¿Se acordará de mi alguna vez?,

como siempre sin respuesta,

cartas al mar,

notas al viento,

versos sin voz...

A veces sentada contemplo el paisaje,

sola como siempre,

con la sonrisa distinta desde aquel día que no pude hablar.

Alguna vez llega algún libro,

alguna curiosidad de aquel mundo fuera de mi isla,

ya aprendí a navegar,

ya aprendí a construir,

ya aprendí a comunicarme,

pero no he podido aprender a hablar.

Vera Alexssan