No me importó

Cuando te fuiste sin más,

 no me importó,

no me embargó el dolor

en todas aquellas noches de incierto desvelo

siempre busque justificar.

Cuando entendí que no podría ser,

me lo banqué y caminé al frente

aún en todos los días de tu extraviada realidad

intenté superar,

y de las fobias de alcoba que cegaban tus noches

las perdoné para seguir;

Los balbuceos infantiles y la absurda tozudez,

tampoco me importó,

las preferencias triviales y las telenovelas,

no serían  motivo de discusión,

la ausente respuesta a la economía,

no hicieron mella en los días nublados.

Incluso aquella primavera en que buscaba

como un niño tu mano,

para salir del pozo

y  no encontré si no tu pie empujando más al fondo

aún seguí allí,

O cuando había que hablar y tenías solo silencio

pensé… ya será mañana;

Y cuando hablabas y hablabas

sin escuchar el mutismo,

tampoco… me importo

O cuando caí en la talla de asesino

bribón irresponsable

mal padre, putero  y mentiroso

Aun seguía y pensaba… comete un error,

no soy golpeador ni  abusador de féminas,

comete un error…

Incluso de tus amenazas con los jueces baratos

y el cuchicheo tinterillo,

no dije nada más que…

eso no es justo.

Tampoco me importó que no vieras

que no leyeras o escucharas

lo que abrazo cada tanto

en las cuerdas

o en la pluma vigía.

No me importó tu mal carácter

la ofensiva descarnada con la madre

O que aguaras la fiesta

en tantos viajes

y al final solo de nuevo.

en un verano del sur.

No me importó  la ausencia

cuando  pesaba más la cruz;

No me importó,

creyendo en la humana humanidad

no me importó,

puedo jurar que no me importó

No me importó la soledad,

no me importó la pereza,

no me importó la inconsciencia,

no me importó la insuficiencia,

no me importó la impaciencia,

no me importó la intolerancia,

no me importó la sordera,

no me importó la intransigencia,

no me importo la inmadurez,

no me importó,

no me importó,

todo cambiaría…

algún día;

Y ahora que… yaces ahí muerta para siempre

no sé qué decir

ni pensar

sólo que…

tal vez…

si me importó,

pero que por fin,

ya no me importa.