Perderse

Como pretexto de lo eterno,

Me vuelvo prenda de tu joyero,

Un adorno para tus días de sueño.

Como artículo de recuerdo,

Guárdame, esconde mi paradero.

Escóndeme dentro de tu pecho,

Entre la piel y la carne,

En medio del espinazo y el corazón.

Resguárdame entre tu delirio

Detrás de la razón.

Esconde mi palabra en un cuaderno

Mi pecado en un rosario;

Con pretexto de que me olvides,

Y me encuentres un día por error,

Mientras repasas tus notas,

Mientras recuerdas a tu dios.

Escóndeme debajo de la cama,

Detrás del viejo armario;

Con pretexto de que me visites,

Un día que me busques con fervor,

Mientras rebuscas tu abrigo,

Mientras sueñas con nuestro amor.

Ocúltame con miedo de volverme a ver,

Con recelo de ser encontrado alguna vez.

Ocúltame sin titubeo, en el más obscuro cofre

De tus infiernos. Luego me olvides,

Me pierdas y no encuentres llave alguna.

Con el pretexto de perderme en tu ser,

Extravía mi existencia en tu hermoso beso,

Y recuérdame un día que te sientas fallecer.

Perdido en ti, es el resumen del cielo,

Y todo lo que parece eterno,

Lo que vive y perece,

Lo que hiere de tanto embellecer.