Es muy difícil de explicar lo que me atraviesa cada vez que te tengo cerca si simplemente el hecho de saber que te veré en poco tiempo y estaré contigo ya sea unos segundos, algunos minutos, o tal vez pocas horas hace que mis sentidos fallen, mi corazón se acelere y mi coordinación, que de por sí nunca es mucha se detenga por completo si cuanto al fin te veo después de tanto tiempo, de tantas horas de sufrirte en silencio, de tantas noches de insomnio, y tantos días fríos escasos de color, te encuentro tan radiante como siempre, tan bella, tan sagaz, tan inteligente, tan inalcanzable como nunca nada, admito que en ese momento me recorre una repentina sensación de llorar cuando con tan sólo mirar a tus ojos así sea de lejos recuerdo cuántas veces los miré de cerca y vaya que mirar tus ojos es un privilegio, es que en tus ojos hay cielo, mar, océano, hay paraíso, en tus ojos hay día y también hay noche, en tus ojos hay un poco de mal y hay un poco de bien, en tus ojos se esconden todos los sentimientos que guardas, todas las cosas que nunca me dijiste, y las cosas que tal vez nunca me dirás, es tus ojos hay vida, es por eso que cada vez que miro tus ojos siento por un instante que fui dueño del universo. Ah pero si te acercas a mí y me tocas ya sea por accidente, por intención, por maldad o porque inconscientemente me extrañas, siento tantas cosas tan impredecibles, siento que me alejo del mundo, que mis problemas ya no existen, que la vida se me va cada segundo que te tengo lejos, y cuando digo lejos puede ser a mil kilómetros o a dos centímetros de mi piel porque me recuerdas que tú eres el único lugar en el que realmente quiero estar, siento que te quiero conmigo aunque no me quieras contigo, que estar junto a ti es todo lo que me hace feliz, todo eso me lo dice el hormigueo que recorre por mi cuerpo, la necesidad que tengo de cerrar los ojos para sólo sentir que estoy junto a ti y que a tu lado nunca me sentiré solo, pero como todo, esto tiene un precio, un precio muy alto que tengo que pagar cuando me sueltas e instantáneamente regresan mis problemas, mis tristezas y mis errores, un precio que pago cuando tengo que volver al mundo real y descubrir que no te tengo junto a mí y que nunca pude hacer que sintieras eso que la gente llama amor, ese impacto de vida que nos llena y nos hace sentir completamente felices, y aunque nunca sepa lo que tú sientes cuando me tocas y mucho menos lo que él siente cuando se acerca a ti, mi deseo más profundo es que sigas siendo tan feliz a su lado como ya lo eres, estoy dispuesto a pagar el precio porque para mí eres más importante que mí mismo, y aunque tal vez nunca pueda saber a ciencia cierta todo lo que siento cuando me tocas porque así es el amor de impredecible, de repentino, tan difícil de explicar e imposible de olvidar, quiero decirte que cada vez que me toques piénsalo dos veces porque recordaré ese momento por el resto de mis días…
- Autor: David S ( Offline)
- Publicado: 8 de octubre de 2015 a las 21:49
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 79
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