El destino.

Quiero ir a ti, porque se que eres mi destino y eres todo lo que busco.

Quiero ir a ti porque eres el calor en las noches de invierno, el cobijo para los días lluviosos, el coraje para ir por más, siempre por mas.

Estoy seguro de que tu eres el camino a la verdad y la vida.

Quiero ir a ti porque en ti encontré tu corazón de niña y tu cuerpo de mujer.

Quizás estaba ya escrito que pasaran milenios, siglos, décadas, años, meses, días, para que en este momento coincidiéramos tu y yo.

Pudimos haber nacido en épocas totalmente diferentes, en lugares tan distantes uno del otro, que el habernos encontrado en esas circunstancias hubiera sido imposible.

Pero no.

Nacimos con solo unos años de diferencia, y en el destino estaba que tu y yo nos conoceríamos y te encontré y me encontraste.

Ese pequeño gran milagro que lleva tu nombre, me hace creer en el destino.