¡¡¡ VERSOS QUE MÍ PLUMA SIEMBRA !!!

El Hombre de la Rosa

 

 

¡¡¡ VERSOS QUE MÍ PLUMA SIEMBRA !!!

 

*** Versos de la Rosa ***

 

Cuando las palabras surgen de una pluma

el ardor de la letra inflama tú níveo papel,

recitando la grafía que arrastras al vórtice

de cantarinas estrofas que saciasen la sed.

 

El bardo que quiere expresar la evocación

que articulan las bellas estrofas de versar,

cuando pone el alma en la tinta que elogia

sentimientos del delirio de su bello rimar.

 

El corazón del poeta es el motor de letras

cuando el soplo de la prosa sabe a plétora,

vertiendo en esa mente las flores de saber

acicala rimas que desea acariciar el viento.

 

Imponiendo con las letras la seña de amor

la abraza besándola con su palabra escrita,

con sus carnosos labios plenos de ensoñar

dejaste el sentimiento de amor en el verso.

 

Declamando una poesía escrito con cariño

entregas ese viento que respiras con amor,

envueltos con suaves caricias de los labios

rozaste el sentir que puede recitarlos bien.

 

Aclamando la fogosidad del cuerpo amado

cuando saciada relajas la pasión al frenesí,

plasmas dúctilmente la placidez del cariño

 por recitar ese sentir enamorada de mujer.

 

Enamorarse es saber vivir siempre juntos

regalando su cobranza al placer del amar,

dejaste al lado las sensiblerías despóticas

engarzas los versos del placer de besaros.

 

Al entregarla todos tus estrofas con amor

describes al saborearlos miasma agridulce,

que sopla un verso a tú ardor en el tálamo

exaltando el dúctil soplo de promiscuidad.

 

Autor:

Críspulo Cortés Cortés

El Hombre de la Rosa

12 de octubre de 2015

 

 

 

 

 

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios +

Comentarios10

  • Claro de Luna

    Muy hermoso poema, las palabras bien empleadas siempre despiertan su magia para el amor. Saludos

    • El Hombre de la Rosa

      Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimada señora poetisa y amiga Claro de Luna...
      Me atrevo con permiso de nuestro querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad su hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
      """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
      Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
      España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
      Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
      Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
      En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
      España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
      La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
      El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
      Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
      En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
      Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
      En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
      Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
      Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
      Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
      A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
      Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
      Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
      Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
      Críspulo Cortés Cortés
      El Hombre de la Rosa

    • rosamaritza

      Un llamado de amor, y gran fraternidad, entre seres hermanos en busca de paz, en este hermoso poema,abrazo y beso mi querido Hombre de la Rosa
      rosamary

      • El Hombre de la Rosa

        Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimada señora poetisa y amiga Rosamaritza...
        Me atrevo con permiso de nuestro querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad su hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
        """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
        Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
        España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
        Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
        Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
        En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
        España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
        La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
        El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
        Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
        En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
        Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
        En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
        Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
        Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
        Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
        A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
        Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
        Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
        Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
        Críspulo Cortés Cortés
        El Hombre de la Rosa

        • rosamaritza

          Gracias mi querido amigo, por el compartir de la historia, y la gran nobleza y justicia en sus palabras, un gran cariño y abrazo amigo del alma
          rosamary

        • sandor

          Me agradan esto versos que nos unen y aprovecho para comentar algo que mucha gente no sabe. España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones. Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias. España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
          Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse. Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte. En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e intauraon jornadas de trabajo de seis horas. España nunca comerción con esclavos y solamemente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra....comparse con Jamaica, Haiti, la Honddura británica, etc. La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusar de mil tropelías que no cometí. El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de ls Indias, una joya en cuanto a derechos humanos.
          Gracias amigo
          Carlos

        • sandor

          Disculpa amigo, que aproveche tu espacio porque quiero aclarar el anterior comentario
          Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares». EN «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
          Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
          . En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes». Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores. Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
          Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo. A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época. Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil.
          Agradecerte el espacio que me dejas, porque me siento hipano de los lados, y orgulloso de esta unión y que se sepa la Historia,
          Carlos

          • El Hombre de la Rosa

            Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimado compañero poeta y amigo Sandor...
            Me atrevo con tu permiso querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad tu hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
            """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
            Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
            España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
            Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
            Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
            En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
            España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
            La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
            El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
            Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
            En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
            Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
            En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
            Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
            Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
            Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
            A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
            Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
            Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
            Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
            Críspulo Cortés Cortés
            El Hombre de la Rosa

            • sandor

              Muy agradecido, sobre todo tras la publicación de una carta abierta contra mí por un fanático. Tiene que haber de todo.
              Un abrazo
              Carlos

            • Marc Tellez Gonzalez

              Excelente verso que recorre cada sentido a trasmitir.

              Recibe mi abrazo hombre amigo Críspulo.

              Marc.

              • El Hombre de la Rosa

                Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimado compañero poeta y amigo Marc Tellez Gonzalez...
                Me atrevo con permiso de nuestro querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad su hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
                """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
                Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
                España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
                Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
                Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
                En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
                España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
                La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
                El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
                Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
                En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
                Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
                En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
                Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
                Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
                Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
                A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
                Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
                Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
                Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
                Críspulo Cortés Cortés
                El Hombre de la Rosa

              • Nancy Ruiz Lee

                La vida misma es un poema, y también la juventud necesita aprender que la fuerza de las palabras penetra más hondo que la de los emoticonos que usan en las redes sociales. Creo que aún las mujeres desfallecen ante la poesía. ¡Muchas gracias, amigo por el regalo de este poema hoy!

                • El Hombre de la Rosa

                  Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimada señora poetisa y amiga Nancy Ruiz Lee...
                  Me atrevo con permiso de nuestro querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad su hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
                  """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
                  Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
                  España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
                  Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
                  Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
                  En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
                  España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
                  La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
                  El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
                  Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
                  En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
                  Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
                  En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
                  Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
                  Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
                  Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
                  A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
                  Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
                  Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
                  Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
                  Críspulo Cortés Cortés
                  El Hombre de la Rosa

                • Alexandra L

                  Excelentes versos Crispulo, siempre he pensado que nos une mas que el idioma, costumbres, lazos de sangre, el encuentro de dos mundos. Grata lectura.

                  Un abrazo, feliz tarde, Alex.

                  • El Hombre de la Rosa

                    Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimada señora poetisa y amiga Alexandra L....
                    Me atrevo con permiso de nuestro querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad su hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
                    """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
                    Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
                    España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
                    Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
                    Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
                    En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
                    España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
                    La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
                    El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
                    Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
                    En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
                    Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
                    En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
                    Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
                    Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
                    Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
                    A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
                    Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
                    Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
                    Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
                    Críspulo Cortés Cortés
                    El Hombre de la Rosa

                  • Armando Luna Pineda

                    Bellos versos del alma hispana se reconoce el fervor un sus palabras, simplemente somos hermanos. Saludos y que la dividad santisima alargue los dias sobre la gaz de la tierra, para compartir las de su versar ingenioso.

                    • El Hombre de la Rosa

                      Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimado compañero poeta y amigo Harmando Luna...
                      Me atrevo con permiso de nuestro querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad su hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
                      """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
                      Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
                      España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
                      Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
                      Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
                      En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
                      España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
                      La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
                      El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
                      Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
                      En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
                      Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
                      En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
                      Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
                      Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
                      Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
                      A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
                      Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
                      Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
                      Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
                      Críspulo Cortés Cortés
                      El Hombre de la Rosa

                    • Ma. Marisol Giorno

                      Un gusto disfrutar de su magistral pluma abrazos amigo

                      • El Hombre de la Rosa

                        Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimada señora poetisa y amiga Ma. Marisol Giorno...
                        Me atrevo con permiso de nuestro querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad su hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
                        """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
                        Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
                        España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
                        Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
                        Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
                        En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
                        España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
                        La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
                        El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
                        Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
                        En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
                        Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
                        En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
                        Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
                        Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
                        Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
                        A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
                        Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
                        Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
                        Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
                        Críspulo Cortés Cortés
                        El Hombre de la Rosa

                      • María C.

                        Hombre de la Rosa, sigue sembrando belleza en cada poesía que nos dejas.
                        Un abrazo

                        • El Hombre de la Rosa

                          Muchas gracias por tu generoso y preciado comentario estimada señora poetisa y amiga Isiszkt (Kitty)...
                          Me atrevo con permiso de nuestro querido compañero Sandor a poner como ejemplo en estos días que se celebra la Hispanidad su hermoso compendio de ejemplaridad entre los pueblos de habla española...
                          """ España nunca tuvo colonias como el resto de las Naciones.
                          Ya en la Leyes de Indias, y en el testamento de Isabel la católica, se dice las llama claramente "Provincias de Ultramar", nunca pues hubo colonias.
                          España, era el el único país que pudo llevar a cabo esa empresa, fue el primer estado moderno al contar con cuatro pilares,que sin ellos hubiese sido imposible la empresa, y que Francia e Inglaterra no lo tuvieron hasta pasados casi 200 años: Una Gramática culta (se suprime el latín), una unificación del territorio, una religión unificada y un ejército profesional y una flota de barcos impensable.
                          Conviene saber que en Las Layes de Indias se prohíbe la esclavitud, y permite matrimonios mixtos, eso sí, había que bautizarse.
                          Evidentemente hubo abusos, pero si llegaban a oídos de los reyes el castigo era la pena de muerte.
                          En Uruguay, los jesuitas fueron los primeros que en sus Reducciones, con el apoyo de la Corona, prohibieron la pena de muerte e instauraron jornadas de trabajo de seis horas.
                          España nunca comerciarón con esclavos y solamente hay que fijarse en el color de la piel de los paise de habla hispana, en que hay una minoría de raza negra.... comparase con Jamaica, Haiti, la Hondura británica, etc.
                          La Leyenda negra con el fin de acabar con el Imperio español se le acusa de mil tropelías que no cometieron.
                          El fenómeno del mestizaje no fue una casualidad. Yo invito a leer la Leyes de las Indias, una joya en cuanto a derechos humanos."""
                          Hay un hecho que, «ha sido silenciado de modo continuo», y es que España «no tenía colonias en América, sino que eran territorios de ultramar cuyos habitantes tenían los mismos derechos que los peninsulares».
                          En «la Constitución de Cádiz lo refleja inequívocamente en su encabezamiento, donde a todos los llama españoles de uno y otro lado del océano». A partir de ahí, «los indios, los mestizos y gran parte de los criollos eran fieles a Fernando VII, pero fueron los potentados quienes llevaron a cabo la independencia»
                          Inglaterra Y Holanda EN SUS las colonias sojuzgadas por sus antepasados, los nativos por ejemplo tenían vedado el acceso a la enseñanza (en las Españas de Ultramar, por el contrario, se fundaron cientos de colegios y universidades), o donde no estaban permitidos los matrimonios mixtos (que en las Españas de Ultramar eran asiduos, como prueba la bellísima raza mestiza extendida por la América española), porque sus leyes criminales así lo establecían. crímenes cometidos por españoles a título particular, y en infracción de las leyes promulgadas por nuestros reyes. Porque lo cierto es que los crímenes que se pudieran cometer en América fueron triste consecuencia de la débil naturaleza caída del hombre; pero no hubo crímenes institucionalizados, como en cambio los hubo en Estados Unidos o en las colonias inglesas u holandesas, pues las leyes dictadas por nuestros reyes no sólo no los amparaban, sino que por el contrario procuraban perseguirlos.
                          En su testamento, Isabel dejó ordenado a su esposo y a sus sucesores que «pongan mucha diligencia, y que no consientan ni den lugar a que los indios reciban agravio alguno ni en su persona ni en sus bienes».
                          Este reconocimiento de la dignidad de los indígenas es un rasgo exclusivo de la conquista española; no lo encontramos en ninguna otra potencia de la época, ni tampoco en épocas posteriores.
                          Los indios fueron, desde un primer momento, súbditos de la Corona, como pudiera serlo un hidalgo de Albacete-; y los territorios conquistados nunca fueron colonias, sino «provincias de ultramar», con el mismo rango que cualquier otra provincia española.
                          Algunos años más tarde, conmovido por las denuncias de abusos de Bartolomé de las Casas, Carlos I ordenó detener las conquistas en el Nuevo Mundo y convocó en Valladolid una junta de sabios que estableciese el modo más justo de llevarlas a cabo.
                          A esta Controversia de Valladolid acudieron los más grandes teólogos y jurisconsultos de la época: Domingo de Soto, Melchor Cano y, muy especialmente, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda; y allí fue legalmente reconocida la dignidad de los indios, que inspiraría las Leyes de Indias, algo impensable en cualquier otro proceso colonizador de la época.
                          Por supuesto que durante la conquista de América afloraron muchas conductas reprobables y criminales, dictadas casi siempre por la avaricia, pero nunca fueron conductas institucionalizadas; y la Iglesia, por cierto, se encargó de corregir muchos de estos abusos, denunciándolos ante el poder civil."""
                          Que paz, el amor y la felicidad sean la puerta de tu hogar para siempre...
                          Un fuerte y sincero abrazo de sentida amistad y afecto...
                          Críspulo Cortés Cortés
                          El Hombre de la Rosa



                        Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.