Soy el que aveces ama no amar,
Soy un café eterno y la soledad con dos de azúcar,
Soy un caminante que no va a ninguna parte,
Aveces pienso que no debí nacer
Y la tristeza me hace feliz,
Aveces me convierto en artista,
Otras veces soy poeta con letras dibujadas en el pecho.
¿Hay algún lugar reservado en el cielo para los ángeles suicidas?
Escribo para mantener un poco de cordura
Y tener la suerte de tener una epifania por fugaz que sea.
Soy un destello de luz que desgarra los llantos de un ángel que se suicida por amor,
Por amor a la muerte que lo espera con su mortal abrazo, con su beso de amor inmortal.
Solo eso soy, uno de tantos.
- Autor: Tulipán Negro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 21 de octubre de 2015 a las 21:43
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 92
Comentarios1
Muy triste y emotivo, reciba todas las bendiciones, es más fácil morir, lo difícil es vivir y entre retos renacer cada mañana.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.