Tu grave herida es el agua que bebo,
dañando mi garganta tan cruel rayo,
rosas fallaron por el claro mayo,
ya mi perfume ni pruebas ni pruebo.
Luchando por vivir un tiempo llevo,
ante las puertas de la muerte me hallo,
de aire hago mi aliento y me desmayo,
porque florecer ni se ni me atrevo.
Las caricias del pájaro que llega
y su cantar mis ramas estremece,
llega un frescor igual a hierbas de vega.
En la espesura del jardín se mece
un lirio, que al compás del viento juega,
y mientras muero todo nace y crece.
Lola Barea.
- Autor: Lola Barea. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de octubre de 2015 a las 17:47
- Comentario del autor sobre el poema: Este soneto fue inspirado en un bello rosal, por mucho que le cuidaba mi rosal se me moría, de ahí estos versos. Espero que os guste. Gracias. Que pasen un lindo fin de semana. BSS.
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 52
- Usuarios favoritos de este poema: Cristian Jovani
Comentarios2
Tu poema es bonito, pero tu rima no es tan fluida, aunque entiendo que relatas y haces poesía, ya que el rosal lo comparas con una vivencia, dentro de ese aspecto tu poema es puro y bello...
Hermoso
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