Escribiría en tu alma la llama candente
de un suspiro leve, profundo y enamorado,
creería que en instantes eternos nada existe,
quizás la espera infinita casi agitada
se sienta abandonada como barcos en la arena,
o quizás el tiempo me confine a la espera.
Acantilados mares besan a las nubes,
mi alma besa a la ausencia de tu alma,
las frescas hojas envejecen en otoño,
mis deseos palidecen al ocaso.
Litigio entre la razón y mi pasión,
confinado a lo absurdo creería mi razón,
pasión obstinada a llevarte entre mis sienes,
regreso a los sueños donde brillas como estrellas,
donde emerges como rosas el alborada prematura,
donde callas al silencio con la miel de tus palabras,
y donde un beso al aire despierta al amor.
La espera agitada de tu amor
renace ilusiones en la sequía y en áridos recuerdos,
trasciende el arte de escribirte y enamorarte,
puedo esperar millones de primaveras,
cuando se ama en la inmensidad
la espera parece un instante fugaz.
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Autor:
Poeta del silencio (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 29 de octubre de 2015 a las 18:29
- Comentario del autor sobre el poema: La inmensidad del amor contendrá el vacío que deja la espera de tu amor, otra inspiración para plasmar sentimientos.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 165
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge H. Ramirez, angeldelanoche
Offline)
Comentarios1
El amor espera, pero la pasion, y el calor de una caricia se desesperan.
Excelentes versos Poeta del Silencio.
Saludos y recuerdos.
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