Había un pueblo llamado Drulo, en occidente. Era verano y en el trópico siempre hay calores extremos, por eso existía un enigma por descubrir. Le llamaban el dragón de la costa, llamado el dragón muerto. Era un secreto a viva voz en el pueblo de Drulo. Cada vez que visitaban a la costa, el dragón daba calores extremos a la gente. En el pueblo se habían muerto docenas de personas, cuando llega el calor, lo que ellos hacen, es implorar al dios de los vientos que les devuelva su aire, su vida y su libertad de vivir en un pueblo donde la intriga, el dilema y la incógnita son lo primordial. Cada vez que lo visitan las gentes, nadie se percata de esto, nadie dice nada, y lo peor aún es que mueren las gentes al visitar a Drulo. Cuenta la historia que este dragón de la costa puede nadar en el mar, salir fuera y adentrarse al pueblo con su aleteo de cola salvaje, y cada vez, que siente frío le sale fuego de su interior, osea, de su boca hasta llenarse de calores extremos que puedan lidiar con su hábitat y su supervivencia. En Drulo le llamaban también el dragón de calor, nadie lo podía ver ni escuchar, por eso era el calor tan fuerte por su perseverancia. En Drulo se convertía el mar en sal, una parte de la costa, cuando llegaba el verano a dar más calor se evapora una parte del mar, y se hacía mucha sal. En ese tiempo los turistas eran bienvenidos y visitaban mucho a Drulo. El dragón se escondía porque no era necesario salir, él sentía demasiado calor por ser la estación de verano.
En Drulo se llevaba a cabo una fiesta donde todos salían divertirse. Habían máquinas de diversión, juegos, hojuelas de maíz y algodón de colores. Todas las familias salían a divertirse. En una noche de estas fiestas por poco sale el dragón muerto o de calor, porque el mar cuando es de noche se ponía frío cuando el sol no estaba. Las gentes sienten un rugir tan fuerte desde la cueva Drulística y es que el dragón sale del mar y se esconde en la cueva. Se lleva a cabo una serie de campeonatos en las ceremonias rituales del pueblo. Y prosigue la fiesta, una familia entera de dos adultos y dos niños, salen a caminar a las afueras de Drulo y se percatán que en la arena hay huellas gigantes del pie del dragón de la costa, y huevos gigantes como de 7”de largo x 8”de ancho. No era macho sino hembra y ponía huevos y los dejaba fuera de la tierra. Y exclamó, el papá de Jin dijo, -¡Oh, algún animal del mar puso huevos aquí, pero, son muy gigantes!, ¡como de dinosaurios…………!y se le fue el habla, cuando en un ¡zás!, y sale el dragón de la costa hacia la cueva Drulística, y se echa el mar una ola gigante que casi los arropa, y, todos atónitos se quedan observando la escena como si nunca, y es que nunca han visto un dragón en la costa de Drulo. Todos gritan en la costa y viene el costero a dar vigilancia, que por cierto, en él, sintieron un calor extremo, y es que como decía la historia en Drulo existía un calor extremo casi a muerte. Y se quedan conversando, él les dice, -cuidado tengan en la costa que hay muchas historias verídicas de ese dragón aquí- y observan la cueva Drulística, pero de ahí no sale nada. Y fue que el mar cuando se pone frío el dragón de calor o muerto o de la costa, como le quieran llamar, sale del mar hacia la cueva. Y sólo, se ve fuego y fuego de la cueva Drulística y es de la boca del dragón que se encuentra ahora en la cueva.
Llega mediodía y todavía están aguardando en la cueva para ver si sale algo misterioso o alucinante de la cueva Drulística. Y ¡zás!, sale el dragón más grande de lo que esperaban y se echa al mar y hace una ola super gigante como ella. Y todos en vigilia y se quedan atónitos con lo que ven y corriendo salen todos. El dragón no trata de hacer daño es inofensivo, miedoso y le tiene miedo a todos. Y viene el vigilante, otra vez, y les asegura que, -no salgan de Drulo o mueren como yo y para siempre, porque el que vé al dragón se convierte en él, por eso es que es tan gigante, cada vez que alguien lo mira, a él se le adentra tu corazón y se hace más fuerte y grande, si salen de Drulo, ustedes mueren de calor como morí yo, una vez, y él me trajo hasta aquí y cada vez que lo veo me deja su calor extremo-.
Fin
- Autor: EMYZAG (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 31 de octubre de 2015 a las 00:02
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 70
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