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Caminó en medio al bosque.
Se sentó en silencio debajo de una magnolia en flor. Atento estaba a todo lo que sucedía a su alrededor. Era la primera vez que lo hacía. Había sentido un profundo deseo de hacerlo y no lo pensó dos veces. Nadie se percató de su ausencia.
Inmensidad de colores vinieron a su encuentro. Jamás les había visto así. Intensos, vivos, profundos. Observó la gran variedad de verdes que se mezclan en la natura. Dirigió su mirada al cielo y pudo observar tantos tonos de azules, quedó impresionado.
Cerró sus ojos y aspiró profundo. Se sorprendió con los diversos aromas que percibía. Algunos pudo identificar, otros no.
Tantos sonidos acudieron a su sensible oído: pájaros, insectos, aviones que pasaban a lo lejos, animales varios, el riachuelo que estaba a pocos pasos.
Se extendió y comenzó a palpar, con la palma de su mano, todo cuanto tocaba: hierva, tierra, rocas…
El sol tímido tocaba y entibiaba su cuerpo martirizado.
Sin querer vinieron a su mente tantos recuerdos del pasado. Sus padres, sus hermanos, la escuela, su primer amor, sus alegrías y penas, sus fracasos...
No pudo reprimir una sonrisa espontánea que dibujó su rostro. Tanta agua había pasado por debajo del puente de su existencia.
Las nubes comenzaron a cerrar el horizonte. Algún trueno se escuchó a lo lejos y de repente comenzó a llover.
Se desnudó y levantándose comenzó a caminar de nuevo. Sintió como la lluvia mojaba su cara, su pecho, su cuerpo en general. Extendió sus manos y comenzó a girar libre, riendo espontáneamente.
Una pregunta le asaltó de repente: ¿por qué no he gozado de todo esto antes? Sintió tristeza de haber pasado su vida entre ires y venires, entre preocupaciones varias. No había tenido tiempo de nada. Le habían enseñado desde pequeño que perder el tiempo era pecado. Tenía que trabajar y producir. La avaricia había mordido sus entrañas y su objetivo era el acumular. Era un hombre de negocios con gran suceso. Pero ¿era feliz? se interrogó. ¡No!, no lo era.
En aquel instante había probado un rastro de felicidad. Qué ironía. La vida es extraña, se dijo.
¿Dónde está Arturo? – preguntó el doctor Alberto a la enfermera de turno –
¿No está en su habitación doctor? – le respondió Lucía un tanto sorprendida –
Acabo de venir de su habitación y no está – le dijo el galeno en forma enérgica –
Pues no lo sé. Esta mañana temprano lo mediqué y estaba ahí doctor – le respondió la enfermera tratando de mantener la calma –
Le repito que no está. Búsquelo inmediatamente. Ore a sus santos mi querida. Si le sucede algo, usted será la responsable directa – le dijo Alberto en forma amenazadora-
¡Inmediatamente doctor! – le respondió la enfermera –
Acto seguido salió corriendo, llamando a todos los que podía.
Lo buscaron por todo el reparto de oncología. No estaba. Bajaron a la planta baja y siguieron la búsqueda.
Lucía desesperada salió por la puerta trasera del hospital, la que conducía al parque. En el suelo encontró el gorro de lana que solía llevar Arturo. Miró a lo lejos y vio que el portoncito que conducía al bosque estaba abierto.
- ¡Dios mìo! ¿Arturo dónde estás? – se preguntó inquieta. Llovía a cántaros. Temió lo peor.
Llamó a Orlando, uno de los enfermeros que la estaban ayudando a buscarlo
- Orlando creo que se fue al bosque – le dijo – El portón está abierto. Por favor, llama a otros y vamos a buscarlo. De prisa, apúrate.
¡Arturo! ¡Arturo! - Comenzaron a gritar al viento. La lluvia había cesado. Encontraron su pijama cerca del riachuelo.
¡Lucía!, ¡Lucía! Ven, hemos encontrado su pijama – le gritó Orlando –
Corriendo llegó Lucía al lugar.
¡Dios bendito! ¿Dónde se habrá metido este hombre? – Lucía estaba reteniendo sus lágrimas -.
Apreciaba a Arturo. Lo había acompañado durante todo el proceso de su enfermedad. Lo habían ingresado la semana pasada, después de un último tentativo de quimioterapia, con pocas esperanzas de vida. Prácticamente estaba solo. Tenía dos hijos los cuales poco o nunca estaban pendientes de él. Divorciado y abandonado por todos. Era de un carácter especial, pero en el fondo era un buen hombre. El cáncer había carcomido su físico. Setenta años cumplidos.
Caminó hacia el riachuelo, invocando a todos sus santos.
Detrás de una gran roca lo encontró. Desnudo como Dios lo había traído al mundo. En su rostro se dibujaba una sonrisa.
- Arturo, ¡Dios mío!, ¿qué has hecho? – dijo Lucía, sin saber que hacer o que decir – Lo tomó entre sus brazos y sintió que aún respiraba. Un respiro tenue.
¡Orlando!, ¡Orlando! Lo he encontrado, corre por favor – gritó desesperada –
- Arturo, ¿me escuchas? – le dijo mientras secaba su rostro –
Sí, Lucía, te escucho – le dijo Arturo con una voz casi inaudible –
He vivido tantos años Lucía – continuo – He cometido tantos errores. La vida se me ha ido entre los dedos, como la arena fina de una playa solitaria. Mucho tiempo he perdido por ir detrás de las cosas efímeras. Presiento que dentro de poco moriré.
¡Basta Arturo!¡Cállate por favor! Te llevaremos de nuevo a la clínica y te mejorarás. No debiste salir. Has cometido una locura – Le refirió Lucía sin poder contener su llanto -
Ojalá hubiera cometido tantas de éstas locuras mi querida Lucía – dijo Arturo recobrando el aliento después de un ataque de tos – muero lleno de remordimientos. Si yo hubiera hecho, si yo hubiera dicho, si yo… – de nuevo lo interrumpió la tos –
Ella intentó hacerlo callar, pero él insistió.
Por favor Lucía, déjame hablar – le dijo - . Éste es el último acto de mi vida. Qué triste es la vida cuando no se ha sabido vivir. Más triste aún cuando lo entiendes al final del camino. La natura, en mi niñez jugó un papel importante. Me crié entre bosques y animales. Con el tiempo olvidé disfrutar de los detalles de la existencia. Muy ocupado, muy preocupado. Hoy por primera vez en tantos años he saboreado la felicidad. Cuando me diagnosticaron la enfermedad no me lo creí y seguí viviendo como si nada hubiera pasado. La enfermedad me doblegó. Solo ahora veo, siento y comprendo el sentido de la existencia, qué extraña es la vida.
No cometas mi mismo error amiga. Vive. Disfruta de los pequeños detalles de la vida. Ama, sé feliz. Comparte con tus amigos. No te desgastes solo en el trabajar, en las preocupaciones de este mundo. Abre tus ojos, mira la natura, contempla. La vida es solo una. Un error malgastarla entre odios y sinsabores, como lo he hecho yo. Cultiva tu humanidad Lucía. Eres una gran persona.
Llagaron corriendo los otros y encontraron a Arturo en los brazos de Lucía.
Ella les hizo una señal para que se quedaran quietos. Sabía que no había nada que hacer y había que dejarlo expresar todo lo que sentía. Sintió tanta compasión por aquel pobre hombre.
Abrázame, abrázame Lucía, al menos tú – le dijo suplicante Arturo –
Lucía lo abrazó. Estrechó a si aquel cuerpo maltratado. Sintió su último respiro. No pudo contener el llanto.
Aquel día, Lucía al salir del trabajo se dirigió a la fábrica donde trabajaba su marido. Calculó la hora en que salía de trabajar. Lo esperó.
Francisco salió puntual del trabajo y se sorprendió gratamente al ver a su esposa.
¡Ehi que hermosa sorpresa! – le dijo mientras se dirigía donde estaba ella –
Lucía apretó el paso, lo alcanzó y lo abrazó fuerte. Se besaron sin importarles los que pasaban cerca – te amo – le dijo –
¿Pasó algo? ¿No te tocaba trabajar toda la noche? ¿No querías suplantar a Margarita y así ganar un poco más? – le dijo él sorprendido, con un toque de hironía – Sus horarios casi no concordaban. Se habían alejado mucho en el último año entre trabajos y responsabilidades varias.
Francisco ¿me amas? – le preguntó ella mirándolo fijamente a los ojos –
Más que a mí mismo – le respondió espontáneamente –
Otro abrazo efusivo acompañado de un profundo beso.
Francisco se sintió feliz. Hacía tiempo se estaba preocupando por su relación que cada vez sentía más fría. Temía porque le estaba haciendo falta el afecto y el amor de su esposa y las tentaciones había comenzado a tocar a su puerta.
Aquel día comprendió Lucía el sentido profundo de la existencia. Estaba dejando de lado el vivir pleno. El trabajo y el tram tram, poco a poco estaban minando su relación con Francisco a quien amaba. Le vinieron a su mente, las palabras de Arturo:
“Qué triste es la vida cuando no se ha sabido vivir. Más triste aún cuando lo entiendes al final del camino” …. “No cometas mi mismo error amiga. Vive. Disfruta de los pequeños detalles de la vida. Ama, sé feliz”
Mientras se dirigían caminando a casa, en medio de la penumbra, Lucía miró al cielo y vio un gran lucero jamás visto. No pudo evitar pensar en Arturo. De seguro era él que alumbraba en la lejanía.
¡Gracias! - le dijo interiormente – Ambos se perdieron entre el bullicio y la gente.
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Autor:
Kavanaruden (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 10 de noviembre de 2015 a las 09:00
- Comentario del autor sobre el poema: No dejemos que la vida se nos escape entre rencillas, odios y rencores. La vida es un soplo, un instante o se vive o se pierde. Busquemos lo esencial, lo que da sentido al vivir y no nos perdamos en lo efímero. No esperemos que sea demasiado tarde para darnos cuenta. Un abrazo a todos. Kavi
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 165
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., Violeta, rosamaritza, sandor, Ringo Stax, Jorge H. Ramirez, Marc Tellez Gonzalez, Beatriz Blanca, Isis M, Nancy Ruiz Lee, *Artemisa*, Alexandra L, El Hombre de la Rosa, Juan Pedro Castellano, naraPZ, David Arthur, Rosalways, María C., Humberto Peralta
Offline)
Comentarios26
Triste tu relato Kavi, pero nos deja una inmensa enseñanza.
Lo esencial de la vida es amor, amistad, cariño, familia, no dejemos estos tesoros del alma, por lo terrenal.
Sos maravilloso, tus reflexiones son profundas y certeras.
Te quiero, amigo.
Mariita querida.
Eso es lo importante, no dejar que la vida corra y perdamos la oportunidad de vivirla en plenitud.
Me alegra que te haya gustado.
De mi parte un fuerte abrazo
Te quiero
Kavi
Bonita historia y tienes toda la razón no vale la pena, hacer aprecio a quien desprecia .
Un abrazo Shira
Shira querida, amiga del alma.
Asi mismo. Los que desprecian al final el mal se les revierte y terminan solos.
Un abrazo.
Se te aprecia y quiere
Kavi
Hermosas letras que adornan muy de mañana mi mente y mi corazón, en una sabia reflexión, has mencionado los sentidos uno a uno y así has seguido relatando esta bella y ejemplificadora historia de final de vida....mil gracias por tan bello relato.
Un abrazo
LOLA
Lola querida.
Gracias por tu comentario y el tiempo dedicado a leerme.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
La vida, una grande oportunidad, o se aprovecha o se pierde para siempre.
Un abrazo también fuerte para ti.
Kavi
Que lindo como especial escribes mikaviomaramor , una historia verdaderamente hermosa , triste pero con ganas de seguir leyendola...BECHITOS
Mi querida Violetica.
Que gusto siempre verte sonreir en mi rinconcito poético.
Una historia, una reflexiòn.
La vida es una gran oportunidad o se le aprovecha o se le pierde, para siempre.
Te mando un fuerte abrazo
Te quiero amiga del alma
Tukaviomaramor
Una reflexión muy importante, apreciar la vida...cada instante.
Un abrazo...
Asi mismo amiga.
La vida es una gran oportunidad, si no la aprovechamos, podemos quedarnos decepcionados. O se aprovecha o se pierde.
Vivamos cada instante.
Un abrazo Lissi querida.
Se te aprecia y quiere
Kavi
Es precioso! es la forma de vivir a pleno. El mundo te empuja a su ritmo, yo me hago a un lado, que pasen todos los que quieran primero, aquellos que atropellan, yo me quedo un rato, descanso, observo, disfruto, me tomo mi tiempo, luego sigo, es inevitable no seguir la masa, porque la vida misma, las responsabilidades te conducen de esa manera. Sin embargo busco detenerme y disfrutar la vida. Es muy placentero leerte amigo.
Te envío mis besos y abrazos.
Mi querida amiga.
Hagamos eso. Dejemos pasar a los que tienen prisa. Disfrutemos de las pequenas cosas que nos ofrece la vida, de la natura, de una conversaciòn con un amigo o amiga, de una caminata tranquila al caer la tarde, de un paseo por la playa....cosas que no cuestan nada, que las tenemos a nuestro alcance pero las dejamos pasar.
Muchas de las enfermedades, se ha probado cientìficamente, son el resultado de tanto stress, preocupasiones, presiones varias que no dejan vivir al individuo.
Paren el mundo por favor, yo me bajo y voy a pié 🙂
Me alegra que haya sido de tu agrado mi historia.
De mi parte un fuerte abrazo también fuerte y lleno de afecto y amistad
Kavi
Que hermosa historia, y gran realidad, es ahora la vida, bello mensaje mi querido Kavi
abrazo y beso de rosamary
Rosamaritza querida.
Eso mismo, ahora es la vida.
Una oportunidad única que muchas veces no aprovechamos por buscar lo efímero que deja un sentimiento de vacío interior.
Vivamos a plenitud.
Un abrazo. Te quiero
Kavi
Triste, elocuente e intenso relato de esas señales que la vida nos deja..CHAPEAU!
UN ABRAZO
Carlos
Carlos amigo querido.
Gracias por pasar.
Una historia, una vida.
Un abrazo y lo mejor siempre.
Kavi
Muy bonita pero triste historia
que nos deja una enseñanza.
dejar un poco los problemas y las ocupaciones para aprender a vivir y valorarlo que tenemos , disfrutar con los nuestros, sonreír ser felices mientras podamos.
Te admiro tienes un talento único
UN ABRAZO.
Mi querida Myriam
Agradezco enormemente tu lectura y comentario.
La vida pasa, gotea lentamente y a veces no nos damos cuenta porque estamos distraído en tantas cosas que no son lo esencial de la vida y cuando nos damos cuenta se ha ido.
Como bien dices, disfrutar de los nuestros, de nosotros mismos, de las cosas de la vida, sonreír, ser felices....
Trado de ser, de existir a través de mis letras....tengo tanto que contar, que decir, que compartir...
Un abrazo y gracias por visitarme.
Bendiciones
Kavi
Mientras no nos despojemos de los atavios de la discordia, de los corajes, y de los malos entendidos seguiremos enredados.
Es un placer saludarte y visitarte mi hermano Kavi.
Eso mismo amigo.
De parte de nosotros está el desenredarnos.
La vida es una y corta. No vale la pena perderla en lo efímero.
Un abrazo amigo y poeta querido.
Kavi
Sin duda una hermosa historia la que aquí has plasmado. Es una perogrullada, pero vivir es sentirse vivo. A tu personaje, no lo mató la enfermedad, lo mató no vivir.
Un placer leerte, querido amigo.
Un fuerte abrazo
Ringo
Has captado perfectamente amigo.
Arturo muere por no saber vivir, porque no vivió, como bien dices.
Menos mal que Lucìa recapacitó, escuchó y retomó su vida.
Gracias por pasar, leer y comentarme.
Un abrazo enorme amigo del alma.
Te aprecio
Kavi
Precioso relato mi querido amigo, un abrazo
Mi querido amigo
Gracias por pasar y dejar tu comentario.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
De mi parte un fuerte abrazo.
Kavi
MI QUERIDO KAVI UN HERMOSO RELATO Y DE PROFUNDAS REFLEXIONES QUE ELEVAN EL ALMA DULCEMENTE.-.
UN BESO EN LA DISTANCIA CON CARIÑO, TQM.-
MARGARITA
Mi Margarita querida.
Gracias por tu visita y comentario.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Un abrazo
Kavi
Muy sentido y bello el corazón de tu relato querido Kavi, vivir va mas allá de ser casi inerte, ante la maravilla de saberlo hacer.
Recibe mi cálido abrazo.
Marc.
Vivir esa oportunidad que tenemos en plenitud. Quien no la aprovecha llega al final de la vida en plena soledad y amargura.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Abrazo recibido y correspondido amigo del alma.
Bendiciones
Kavi
Una reflexión intensa para estos tiempos de trabajos largos para tener una vida cómoda.
Pero nos hemos olvidado de disfrutar todo aquello que nos da placer, y tarde o temprano nos pasa factura.
Me gustan tus relatos, pues tienes el poder de ofrecer el don que posees.
Un abrazo querido hermanito. Que Dios te bendiga.
Mi querida Beatriz, mi hermana querida.
No dejemos que la vida no vivida bien nos arrebate las cosas positivas y la posibilidad de vivir en plenitud.
Las pequeñas cosas de la vida, por ejemplo estar aquí respondiéndote, son las que dan plenitud. Cultivar la amistad, escribir, pasear, un tramonto, una aurora, una conversación con alguien, amar....
Vivamos hermana querida.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
De mi parte un fuerte abrazo
Kavi
Eres único mi querido amigo, en esta tu forma de narrar bien sean historias o vivencias que siempre de forma elocuente expresas y transmites a modo de enseñanza.
Y que nacida de ti te relega en ofrecerla a los demás, eso es en verdad kavi aprovechar la vida amigo! Pues andas con ello ofreciendo lo que como don a ti ya se te dió.
Te abrazo hermano y te felicito por el inmenso relato de hoy. Siempre hay cada dia algo que aprender, gracias de corazón.
Feliz noche..
Sanzsant.
Mi querido amigo.
Gracias por tu comentario.
Trato de poner a disposición el don recibido, si no es asì se empobrece y muere.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Todo es mérito de la hermosa y caprichosa musa.
De mi parte un fuerte abrazo.
Saludos.
Kavi
Bello y profundamente objetiva tu reflexión, amigo Kavi. Tu razón esencial es el mensaje sobre la vida y si, ella es un momento en el tiempo pero no todos la ven así y por eso muchos están muertos en la vida. ¡Lastima!
Es placentero disfrutar de tus letras.
Abrazo, apreciado amigo.
Muy cierto amiga y es muy triste que muchos ya hayan muerto, siendo aún vivos.
No dejemos que las preocupaciones, el tram tram de la vida, las ambiciones nos arrebaten de la mano la oportunidad de ser, de existir, de ayudar, de dar, de disfrutar de los pequenos detalles de la existencia, que son gratis y nos dan plenitud.
Resistamos a la tentación de entrar en la lògica de un mundo que vive solo de las apariencias y del engaño.
Me alegra que haya sido de tu agrado mi historia.
De mi parte un fuerte abrazo
Kavi
Moli....ojala y se den cuenta que no es tarde....becho tu Lubita hermana, mas enrredada que un carretel de hilo en manos de niños...te quelo, me encantó tu reflexion
Mi Lubi querida.
Eso mismo, nunca es tarde para retomar la vida y realmente vivir en plenitud.
No te enredes tanto mi querida hermana.
Te quiero un montòn.
Tu hermanito el Morito
ay Cututo....tambien yo te amo!
y tranquilo no me ofusco, es parte del trabajo...me voy a Panamá del 25 al 30....Congreso de Economistas...Molito mio!....preparo condiciones...
te quelo, becho de mami, papi y mios
Wow que bien hermanita.
Mi hermanita internacional 🙂
Pues ten cuidado con los panameños, aunque si te enamoras, te secuestras y te quedas por allà te voy a visitar y asi tengo un cuñaìto panameño.
Un abrazote mi hemanita
jejejejejejeje....tranquilo mi colachon no che enamola en 1 chemana, jejejejejeje
te quelo muto mi Molito bello!
ya te enviare fotos...jejejejeje
Como siempre presentandonos y compartiendo hermosas historia amigo querido.Un placer siempre leerte..Saludos desde nuestra Venezuela
El placer es todo mìo mi querida amiga y paisana al ver tu visita en mi rinconcito poético.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Desde aquì te mando un fuerte abrazo.
ànimo siempre.
Se te quiere y aprecia.
Kavi
Nunca es tarde, pues la vida es muy corta para quedarse en ella, como muriendo...
Saludos
Asi mismo amigo John, nunca es tarde para retomar el sentido verdadero de la vida.
De mi parte un fuerte abrazo
Kavi
Bella entrega Kavi, la vida valioso regalo, cada instante único, irrepetible, admirar y disfrutar las cosas sencillas que nutren los momentos de belleza, el afecto puro, sincero, sin disfraces que llena de amor las vivencias que serán duradero recuerdo. Siempre un placer visitar tu espacio.
Un abrazo, feliz noche, Alex.
Mi querida Alex
Disfrutemos de esos momentos que dan sentido a nuestro existir. Esos que bien has mencionado en tu comentario.
La vida es un soplo, un instante, vivàmosla en plenitud.
Un abrazo y siempre bienvenida a este tu rinconcito poético.
Kavi
Que más sentir que bordar tus letras con una prosa tan generosa y bella amigo Kavi..
Un placer leer tus letras...
Un fuerte abrazo de sincera amistad...
El Hombre de la Rosa
Siempre bienvenido Crìspulo a este tu rinconcito poético.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
De mi parte un fuerte abrazo, también de amistad sincera
Seguimos entre letras
Kavi
Hola Kavi,que tal ?
La confesión,el descubrimiento y el quebranto al final de la vida
Escrito con la maestría de siempre,
un placer leerte y aprender de ti...
saludos Fredy!
Fredy amigo y poeta querido.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Una historia, una inspiración....
De mi parte un fuerte abrazo.
Bendiciones
Kavi
Que cierta es la desesperación cuando nos alcanzan todo los "y si huniera. ... " que se nos han escapado; que tristeza descubrir que morimos sin vivir.
Hermosa narración, y más bella esa luz de esperanza que proyecta ... en los últimos estertores de la vida pudo saborear, aunque solo fuera un instante la hermosura de lo sencillo.
Me ha parecido preciosa la narración y la reflexión a la que invita.
Abrazos de cariño.
Rosa Maria
Mi querida Rosa.
Gracias por dejar tu comentario.
Esa era la idea, que al menos al final de su vida, pudo saborear la vida. No tanto morir con remordimientos, sino desnudo, en la tierra, solo con lo esencial en los brazos de alguien que lo cuidò y tenìa estima de él.
Ella pudo recapacitar y cambiar, también gracias a él.
Sufriò mucho, pero al final pudo saborear un poco de tranquilidad y paz.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Un fuerte abrazo de mi parte.
Kavi
Un escrito hermoso, unas letras llenas de maestría, un verdadero placer entrar a leerte y deleitarse con tu pluma.
''VERO AMIGO MOLTO VERO tutto mio pensare'', no se si escribe asi pero quiero dedcir que VERDAD ES TODO LO QUE DIGO.
UNA ABRAÇADA
Mi querida amiga.
Si, està bien escrito amiga querida. Sé que es asì porque eres una persona sincera de buen corazòn, de eso estoy seguro. Gracias
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Una historia, una inspiraciòn.
Da parte mia un forte, forte abbraccio e ti voglio molto bene cara amica.
Kavi
Lo he escrito bien en italiano? jaja mira voy pinito a pinito aprendiendo
UN BESO, FELIZ JUEVES CON NEBLINAS AQUI PERO BUENO ES ASI COMO AMANECIÓ
Asi mismo amiga. Un poco de paciencia y constancia 🙂
Me alegra.
Espero que todo mejor.
Un abrazo
Si hermano mejora, vamos lentos, pero espero que seguros.
Eso amiga. No perdamos la esperanza.
Tienes un correo ahora. Te he respondido 🙂
Un abrazote y ya sabes, siempre pendiente. Mis oraciones constantes por tus enfermitos.
K.
Ahora cuando salga lo leo, merci querido amigo, siempre atento.
TI VOGLIO SEMPRE BENE
Yo creo Kavi que con los años más bien uno se da cuenta que la vida es corta y hay que mirar las cosas bellas y sencillas más a cerca que antes no fueron tomados en cuenta y dedicarse a las personas que uno quiere de verdad.
Un precioso prosa con un mensaje para nosotros todos.
Un fuerte abrazo mi amigo,
David
Mi amigo querido.
Gracias por pasar y dejar tu comentario.
Es cierto, los años nos enseñan, sobre todo, qué cosa es lo esencial.
De mi parte un fuerte abrazo
Kavi
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