Pobre árbol
Pobre árbol por el hacha herido
tan joven condenado a muerte,
sumiso, triste y compungido,
culpando a dios de mala suerte.
Un día habrá en que el verdugo
sabrá llorar, su culpa afrente,
de haber enviado hasta su yugo,
lo que el mismo hizo y lo lamente.
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Las hojas muertas
Las hojas se escurren, mimosas,
de rama y la yema en que anida,
penando descienden, gimosas,
prendida quedando la vida.
Alfombra de gamas preciosas,
-naranja, de rojo amarillas-,
de escarcha pintadas, llorosas
del árbol al pié de rodillas.
©donaciano bueno
http://www.donacianobueno.com/
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Autor:
donbuendon (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 14 de marzo de 2016 a las 04:57
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 25
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni
Offline)
Comentarios2
Hermoso!
Saludos
Nélida
Sí, al árbol lo hacemos leña para nuestro servicio, y solo replantamos los que nos dan beneficio.
Pues según el Genesis, fueron creados para servir al hombre. Y tras estudios de paleobiología resulta que llevan aquí millones de años; y nosotros llegamos antes de ayer.
Buenos eneasílabos
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