Neblina que abandonas la tierra hermosa;
¿Dónde te alejas tan presurosa?
¿Por qué cobarde escapas del sol naciente?
Acaso, ¿Cuál noche blanca le temes al imponente?
Poco a poco desapareces;
Sol que esta tierra deshumedeces,
Gracias por compartir tu calor
Que nos infunde y fortalece nuestro valor.
Pero niebla efímera;
Que el frío aglomera,
Recordar me haces a nuestra vida
Que por un tiempo en este mundo es contenida.
Eterna parece nuestra existencia;
Hasta que llega esta interferencia,
Recapacitar debemos en esta hora
Que nuestra vida es pasajera.
Vive cada día a toda fuerza;
A tu familia con cariño y amor refuerza,
Antes que llegue aquella final despedida
Y en recuerdo se convierta nuestra vida.
Basado en Santiago 4:14
-
Autor:
El Corbán (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 13 de noviembre de 2015 a las 12:28
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 48
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok.
Comentarios1
Siempre nuestra vida se convertirá en recuerdo, y dichoso aquel ser humano que tiene quien lo recuerdo.
Intensas letras sobre la tan temida muerte, fabulosamente hecha versos.
Un placer leerte, poeta.
Cariños.
Gracias María, como siempre tus mensajes son un refrescante aliento a mis escasa letras.
un fuerte abrazo mi querida amiga.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.