En la cueva de ese monte aromado
me cogió la mano,ciñó mi frente:
de relumbre de hiedra fui coronado.
Y prado y luna y cueva y monte y fuente
desparramaron tanto olor amado,
que derretirse sentí el beso ardiente,
que se acercó otro tiempo floreado
a mi piel, a mis labios -¡cuán caliente!-.
De entre las venas sale un ay gozoso:
entre sus brazos me sentí contento:
sobre jergón de paja era dichoso
tener en mis manos, calenturiento,
los cervatillos, siéndoles mimoso,
derramadas las mieles del portento
(salvador)
- Autor: salgomanzano ( Offline)
- Publicado: 19 de marzo de 2010 a las 05:34
- Comentario del autor sobre el poema: el encuentro amoroso siempre es grato
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 137
Comentarios3
MUY APASIONADO TU POEMA..
LETRAS QUE LLEVAN ESE SENTIR HERMOSO SALIDO DE VUESTRA ALMA..
QUEDÉ PRENDADA CON TU POEMA
BESOS Y MIS RESPETOS...
KALITA
inmensa alegría de oír lo que dices en letras.Mi gratitud,Kalita, por tu lectura Igualmente un beso Salvador
Escribíste con tanta pasión, con tanta fuerza, que me imaginé, la cueva, el monte, los paisajes, la brisa y los gemidos!!
Maravilloso soneto!
Sabes como te admiro mi querido.
Un gran beso
muy complacido,delasu,por esos halagos que viertes sobre el poema que has leído y me congratula tanto tu decir, que me haces contento,mi argentinita preciosa. Gratitud por ello Un beso Salvador
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.