Mi mente,
mi cuerpo,
Mis poros respiran un hermoso cantar de notas,
en mi alma,
Pronunciando con desesperación,
Tu nombre...
Cada Instante,
aumentan las ganas de querer verte,
en ese momento,
Explota un mundo
de mariposas en mi ser,
dando a mi sentir la respuesta,
teletransportada en uno de tus sentidos,
el pensamiento acaricia cada parte de mi,
te pienso,
desvanezco,
cierro mis ojos,
te siento en mi.
Y espero tranquilamente el momento justo,
que acabe con esta desesperación
y ganas,
sabiendo que llegara el aproximo abrazo,
apaciguante y acariciador,
de mi doncella,
Tu..
Comentarios1
Que la desesperación no te domine.
El amor es como la lluvia. Pronto volverá a escampar.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.