Sin dormir la madrugada me sorprende
porque soy el vigilante de tu sueño,
y aunque lejos, tu recuerdo no desprende
la alegría de obsequiarte aun mi sueño.
Porque dando de lo poco que tenemos,
nuestra vida se transforma en sentimiento,
contrarresta de nuestra alma los venenos,
multiplica las sonrisas cien por ciento.
El insomnio no es inútil ni dañino,
porque invierto tantas horas escribiendo
mis sonetos que carecen de destino.
Sin embargo, poco importa porque aun durmiendo,
voy soñando que por fin nuestro camino
marcará a estos sonetos su destino.
- Autor: Rafael Rec. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 23 de noviembre de 2015 a las 00:28
- Categoría: Amor
- Lecturas: 163
- Usuarios favoritos de este poema: sanzsant, kavanarudén, CHILENOHOT
Comentarios4
Es una de las vías de escape escribir ante el insomnio amigo Rafael. Y si además nacen tan bellas y sentidas letras todavía más satisfactorio aunque sea una carga el no poder Dormir.
Un placer pasar y leer.
Saludos muy sinceros
Sanzsant.
Hola Santiago!!! Este es otro de los poemas que escribí hace más de veinte años, cuando efectivamente no dormía por los anhelos que me robaban el sueño. Te agradezco que te molestes en comentarlo y que detengas un momento para leer esas sencillas líneas con forma de soneto. Un abrazo hasta España!!
Intenso, profundo, hermoso.
El insomnio que no es dañino ya que es el velar profundo del amor que yace a nuestro lado.
Un gusto, como siempre, leerlo, poeta.
Un fuerte abrazo desde la distancia.
kavi
Gracias Kavi por tus siempre amables y acertados comentarios. Ustedes son mis mejores sinodales, por eso agradezco profundamente su tiempo al detenerse a leer mis líneas. Un abrazo y un saludo.
Es precioso, quizás la paz de la madrugada, trae la belleza de estos versos. Un placer visitar su espacio.
Un cordial saludo, feliz noche, Alex.
Gracias por tu visita Alex. Yo creo que además de la paz de la madrugada, es la circunstancia del momento, el motivo, el corazón, la mente, la pluma, el papel y sobre todo el amor como contexto. Así es como se logra estas humildes líneas. Un abrazo.
Que belleza de soneto, por favor. Me encanta y no lo voy a dejar de repetir. Un abrazo
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