Y la luna, vigilo la noche
hasta el nuevo día
cuando las aves
levantaron vuelo sobre el horizonte
entonces los olores puros
cobijados en el rocío
en los bordes de las hojas.
Las gotas
queriendo arrojarse
una a una
sobre el alma
esa que me sigue
respetando las urgencias.
- Autor: Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de enero de 2016 a las 09:29
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 38
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