¡Silencio!
Allí donde quedaron tus ecos saltan universos,
Universos alegres,
Universos tristes,
Universos que solo yo entiendo,
Universos de meteóricos te amos.
¡Silencio!
Que tus ecos burlan límites y cercanías,
Te multiplican como Italia a las uvas,
Como Roma a la eternidad,
Como Asia a las cumbres,
Cómo los mares a las lágrimas de sirenas heroicas.
¡Silencio, mil veces silencio!
Que nadie hable hoy,
Que callen todos para siempre,
Me quedo solo con tus ecos,
Ecos que solo yo entiendo.
LRL
3-2-2016
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Autor:
Leandro Rodríguez Linárez (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 4 de febrero de 2016 a las 00:57
- Categoría: Amor
- Lecturas: 34
- Usuarios favoritos de este poema: nelida moni
Offline)
Comentarios1
Me gustan los ecos en el infinito.
pueden ser alegres, tristes; que rayan el éter con mas fuerza.
Pero también los hay de paz, tranquilidad, estrés, desasosiego, envidia, caridad y un largo espectro de posturas(estados) del alma que constantemente emiten los diversos seres vivos en su coexistencia. Y que todos juntos forman la conciencia del universo
por ende amigo Leandro ahí me encontraras a tu lado pues yo también los entiendo; y ahora nos toca encontrar donde se hallan como actúan y reverberan en nos, humildes emisores, ¡ea!
Me gusta tu 345. Un abrazo
Primeramente gracias por leerme Luis.Ro. Efectivamente esos ecos células del silencio importan demasiado y sus compañía son tan diversas como útiles.
Fuerte abrazo compañero de ecos.
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